Sindicales

14/8/2014|1327

Por la continuidad de Estancias del Sur

CORDOBA
Que se apruebe el proyecto del Frente de Izquierda

Por la continuidad de Estancias del Sur, que se apruebe el proyecto del FIT ok

Después de once meses, la empresa brasilera Marfrig ha decidido el cierre definitivo del frigorífico Estancias del Sur, despidiendo a 540 trabajadores. Es la conclusión de un largo proceso, ya que el establecimiento mantenía sus puertas cerradas desde comienzos de año, pagando sólo una garantía horaria a los trabajadores, que no superaba el 60% del salario.

Los argumentos esgrimidos por la empresa apuntan a las restricciones comerciales sobre las exportaciones, la falta de previsibilidad y la ausencia de alternativas viables; sin embargo, Marfrig es la tercera compañía de alimentos más grande de Brasil, y uno de los grupos empresarios más importantes de América Latina, y cuenta con dos establecimientos más en nuestro país que trabajan plenamente, uno en San Luis y el otro en Santa Fe.

La industria de la carne es una de las más rentables en Argentina, con tasas de beneficios muy altas. A esto hay que sumar el hecho de que este frigorífico exportaba cuota Hilton y cortes Kosher (la cuota Hilton obtiene, en nuestro país, 40 mil dólares por tonelada exportada a Europa). El cierre de la empresa no tiene que ver con un proceso de quiebra económica del grupo, que, de hecho, ni siquiera habría presentado el recurso preventivo de crisis, sino que corresponde a un vaciamiento llevado adelante por la patronal, quien se apropió de la cuota Hilton que se producía en el establecimiento, para concentrarla en los otros dos frigoríficos.

El proceso de cierre duró siete meses y debió sortear una fuerte resistencia de los trabajadores; para ello, la empresa contó con la complicidad de la burocracia del sindicato de la carne y el gobierno provincial.

Desde nuestra bancada en la Legislatura presentamos en febrero, junto a los delegados y trabajadores de Estancias del Sur, un proyecto de ley para que el Estado garantice la continuidad de estos puestos de trabajo. El proyecto exige la prohibición de despidos y suspensiones en el establecimiento, y contempla -ante la baja en la producción- el reparto de las horas de trabajo sin afectar el salario. También exige la apertura de todos los libros, para ponerlos bajo control de la comisión interna y, finalmente, ante el cierre, plantea la expropiación sin indemnización y bajo control de los trabajadores. En la Legislatura, el oficialismo, con el silencio cómplice de la oposición, bloqueó su tratamiento de manera sistemática, revelando su total compromiso con los intereses de la empresa brasilera contra los trabajadores.



Cintia Frencia, legisladora del Frente de Izquierda