Sindicales

27/11/2014|1342

Por un masivo paro del transporte el 27

Que las asambleas aprueben un plan de lucha por los reclamos


Dirigentes de alrededor de treinta gremios del sector automotor, ferroviario, aéreo y portuario marítimo resolvieron una medida de fuerza de tres o más horas para el próximo jueves 27.


 


La convocatoria plantea una jornada de asambleas simultáneas a partir de las 4 de la mañana en las terminales o cabeceras, para protestar por la falta de respuesta del gobierno a los reclamos por un plus salarial de fin de año por la inflación y la modificación del impuesto a las ganancias confiscatorio del salario. 


 


Los propios convocantes han reconocido que los acuerdos paritarios se cerraron diez puntos debajo de la inflación proyectada para el año y el impuesto al salario licuó prácticamente los aumentos de los primeros meses.


 


Por el impacto del transporte en todas las actividades, esta medida de fuerza, aún parcial, es un salto en esta lucha. Viene precedida por los paros y movilizaciones de los bancarios, de los petroleros de la Patagonia, de los trabajadores de Aluar, de los docentes de la provincia de Buenos Aires y de la CTA Autónoma, que junto con la Coordinadora Sindical Clasista y otras organizaciones movilizaron a miles de trabajadores el pasado 20 a Plaza de Mayo.


 


Los representantes de la CGT Balcarce, oficialista, sólo le pidieron al gobierno no aplicar ganancias sobre el aguinaldo, se negaron a unificar el reclamo por un bono y la anulación del impuesto a las ganancias sobre el salario, y mucho menos a resolver medida de lucha alguna. Los sindicatos alineados con el gobierno de CFK se han convertido en un cero a la izquierda para los trabajadores.


La jornada del jueves 27 debería ser una acción de advertencia. Los trabajadores no deben permitir que el gobierno recaude del bolsillo obrero para financiar un acuerdo con los fondos buitre.


¡Primero los trabajadores, no la usura!


 


Que en todas las asambleas se vote un paro general del transporte de 24 horas y un plan de lucha por el bono, la derogación del impuesto a las ganancias sobre el salario y la reapertura inmediata de las paritarias en todos los gremios.