El Parque Industrial de Almirante Brown es el segundo en importancia del conurbano. Cuenta con 250 empresas y emplea a seis mil trabajadores (censo realizado por la Fadu UBA). Las empresas que se instalan en él cuentan con beneficios impositivos, como la exención de pago por ingresos brutos, impuestos inmobiliarios y tasas municipales. Las ganancias millonarias para las empresas están aseguradas, mientras que las condiciones laborales para los trabajadores son terroríficas.

La metalúrgica Stockl es el ejemplo más claro de esto. Una empresa que factura millones realizando autopartes para Honda, Toyota y Volkswagen, a la vez que sus trabajadores no tienen obra social, jubilación y ART. No cobran los salarios en tiempo y forma, y además lo cobran por ventanilla. A esto se le suma la persecución sindical de parte de la UOM Avellaneda, quienes presionan para que los trabajadores no puedan presentarse a elecciones, convalidando a una comisión interna burocrática.

 

Pero esta situación de ataque a las condiciones laborales reina en todo el Parque Industrial. San Cayetano, cerámicas Lourdes, Offal, General Mills, Rexam, industrias Guidi han sido beneficiadas por ganancias millonarias con trabajadores contratados por las agencias instaladas en el parque sin posibilidad de efectivización y por fuera de convenio.

 

La rotación permanente por las plantas, sin un sistema de transporte que facilite la llegada y salida de los trabajadores, turnos americanos (modalidad que implica, entre otras cosas, el trabajo en diferentes turnos) sin fines de semana, regímenes negreros de siete días trabajados por uno de descanso, accidentes laborales diarios y la violación de toda norma de seguridad, higiene y salubridad que provoca enfermedades en el conjunto de los trabajadores del Parque.

 

El municipio de Almirante Brown es el garante de este infierno laboral, recompensando a los empresarios por flexibilizar. En aceros Angeletti, el municipio otorgó 14 millones de pesos a manera de inversión en 2016, cuando el intendente Mariano Cascallares recorrió la planta junto a Scioli.

 

El panorama de precarización, trabajo en negro y flexibilización laboral en el Parque coloca al gobierno municipal de Unidad Ciudadana como el viabilizador en el distrito del ajuste que impulsa el macrismo.

 

La coronación de este régimen entreguista de las condiciones laborales se da con la creación de la Universidad de Brown (Unab), dirigida por Raúl Marino, dirigente de Cambiemos, de diálogo directo con el intendente. Esta universidad será exclusivamente de carreras cortas, articuladas directamente con el parque industrial (Clarín, 21/11/16). Los empresarios locales declararon su total apoyo a esta universidad que será un semillero de mano de obra barata para las empresas a través de pasantías. El presidente de la comisión mixta del Parque, Fernando Guerra, señaló que es “soñado” tener una casa de Altos Estudios, por lo que se está llevando a cabo un censo en las empresas para conocer las demandas de las empresas (Brown OnLine).

 

En momentos donde se está llevando adelante un pacto entre el macrismo y la CGT, destruyendo los convenios colectivos de trabajo (como ocurrió en Atilra), es urgente la organización de los trabajadores en el conjunto del Parque Industrial. Sólo de esta manera podremos derrotar esta embestida contra las condiciones de vida de los trabajadores.

 

La campaña del Frente de Izquierda se colocó siempre junto a los trabajadores, impulsando la construcción de organizaciones clasistas, combativas y democráticas con independencia de las patronales y el Estado. Repudiando a las burocracias y con la perspectiva de un gobierno de trabajadores. Por esto, hacemos un llamamiento a los trabajadores del Parque Industrial de Almirante Brown a sumarse a la campaña del FIT.