Con una conferencia de prensa en la Legislatura bonaerense, de la que participaron 40 trabajadores ferroviarios, presentamos el proyecto de ley del diputado del Partido Obrero-Frente de Izquierda Guillermo Kane, contra el desguace de Ferrobaires.

El proyecto plantea la anulación del decreto de la gobernadora Vidal que establece el cierre de la empresa provincial a partir del 15 de marzo. La resolución, que dicta el traspaso de Ferrobaires a la Nación, deja en la calle a 1.300 trabajadores, clausura todos los ramales que servían al transporte de pasajeros -con excepción de las líneas que van de Capital a Mar del Plata, Bahía Blanca y Junín- y encarga al Ministerio de Economía la tarea de rematar todos sus bienes.

Junto a la anulación del decreto, el proyecto de la banca del FIT establece como obligaciones del Poder Ejecutivo que cualquier transferencia se dé sobre la base de mantener todos los puestos de trabajo con las mismas condiciones contractuales, salariales y la antigüedad; la obligación de reactivar todas las líneas de transporte de pasajeros, revirtiendo la desconexión que padecen hoy 104 localidades de la provincia y fija, contra el intento del gobierno de pasar la factura del vaciamiento de Ferrobaires a sus trabajadores y usuarios, que sean éstos quienes tengan a su cargo la gestión integral del servicio.

En la conferencia de prensa, los operarios denunciaron que habían comenzado a llegar los telegramas de despido de parte del gobierno nacional, para todos aquellos que no habían aceptado los aprietes extorsivos de la empresa para que firmaran “retiros voluntarios”. En ese marco, anunciaron que se movilizarán el jueves 15 para reclamar que la gobernadora los reciba y dé marcha atrás con la resolución. Llegan a esta acción luego de haber realizado actos en Constitución y en distintos puntos del interior.

Jorge Hospital, dirigente de la Lista Gris ferroviaria (que integra la Coordinadora Sindical Clasista), denunció que se trata de una política de alcance nacional, como se ve en los cierres de ramales en Chaco, que acicatea una recolonización del país dejando en manos de grupos extranjeros el transporte de cargas para garantizar la exportación de las mineras y sojeras. A su vez, marcó el vínculo entre los masivos despidos en Ferrobaires con el ataque flexibilizador al convenio ferroviario firmado por la burocracia de los sindicatos de la rama, y denunció persecución y despidos en Sofse (Trenes Argentinos Operaciones). Llamó a toda la oposición de la Unión Ferroviaria -participaron de la conferencia también miembros de las listas Bordó y Naranja- a unirse para recuperar el sindicato de manos de la burocracia entreguista.

Guillermo Kane agregó que esta ofensiva repercute sobre una gran cantidad de habitantes de la provincia, ya que el cierre del tren puede dejar un tendal de pueblos fantasma, a lo que se suma el impacto de los cierres de fábricas -como es el caso de fabricaciones Militares en Azul. Por eso llamó a desarrollar una fuerte campaña junto a los vecinos de las distintas localidades afectadas y convertir el reclamo por la reapertura de Ferrobaires en una causa popular.