Trabajadores de la pesca agrupados en el STIA (Sindicato de Trabajadores de la Industria de la Alimentación) ocuparon el local del sindicato durante 48 horas reclamando elecciones inmediatas en la seccional y un plan de lucha para arrancar un salario equivalente a la canasta familiar y el fin del trabajo en negro.

En Puerto Deseado trabaja en la pesca cerca de un millar de trabajadores. El convenio firmado por la Federación de la Alimentación a escala nacional consagró un aumento del 19% (dividido en tres cuotas) que, además, absorbe una conquista anterior de 300 pesos de los trabajadores de Deseado “a cuenta de futuros aumentos”. Es decir, los obreros de la pesca en Deseado no obtuvieron un solo peso de aumento.

La seccional está intervenida desde hace dos años. Los normalizadores reclaman un aumento de 100 pesos en los tickets. Los trabajadores repudiaron este pedido y reclaman un mínimo acorde al costo de la canasta familiar. Reclaman, además, la convocatoria a elecciones limpias. El planteo apunta a reorganizar la seccional, en la que las cooperativas en negro han impuesto la ley del despido y se niegan a aceptar la elección de delegados.