Ante la asamblea de Foetra que debía decidir sobre el preacuerdo con Telefónica, el MST sacó un volante que decía “que la base decida”. Pero la base ya había decidido: primero en las asambleas de edificio y luego en el Plenario de Delegados, el preacuerdo ya había sido rechazado por una mayoría abrumadora. La directiva llamaba a la asamblea general para hacer aprobar el preacuerdo que la base había rechazado. Con todo esto a la vista, llamar a “que la base decida” significa desconocer las asambleas de edificios y al plenario de delegados y encubrir que la directiva estaba a muerte por aceptar el preacuerdo.

La “Nueva Izquierda”, es decir la versión devaluada y deteriorada del MST, se ha transformado ahora en más “marinista” que el propio Marín, y recurren al discurso anti-izquierdista de Zamora.

Su ataque a toda la izquierda es cada día más virulento y desvergonzado. “No compartimos las posiciones irresponsables de aquellas agrupaciones opositoras que opinan que nada se logró, que desmoralizan con el ‘todo o nada’ y que con tal de diferenciarse le sacan el cuerpo a la reflexión para la importante decisión que tenemos que tomar colectivamente y por esa vía desmoralizan y empujan a la división” (Telefónicos del MST, 20/7).

Pero no eran las “agrupaciones opositoras” sino las asambleas de edificio y el Plenario de Delegados los que habían rechazado el preacuerdo, porque pensaban que “lo que se logró” no es más que un 16% ficticio del gobierno… que se paga en cuotas.

El mismo rechazo se expresó en la asamblea. Pero la Directiva resolvió desconocer a la mayoría de los telefónicos y declaró que se aceptaba el preacuerdo. El MST aplaudió.

¿Que la base decida? No, la política del MST es “que decida la directiva”.

Cabe aclarar que las “agrupaciones opositoras” son todas las de izquierda (que votaron contra el acuerdo) con la excepción, claro, de los telefónicos del MST que “apoyaron lo actuado por la Comisión Directiva”.

El final del volante del MST que apoyaba vergonzantemente el pre acuerdo con Telecom es una obra maestra de la “sanata”: “Por eso es fundamental que en la asamblea general los compañeros puedan opinar, hablando y votando y todos tenemos que garantizar que las medidas que hoy resolvamos las sigamos llevando adelante juntos”… Bla… bla… bla. Apoyaron el preacuerdo y levantar el conflicto.