Sindicales

17/9/2019

Recuperar la tradición de lucha de la 60

El 4 de octubre se realizará la elección de delegados de la línea 60. La situación de los trabajadores de la que fue una línea de vanguardia de la lucha antiburocrática en la UTA es muy difícil. La empresa viene manteniendo una extensa ofensiva con una fuerte “depuración” de personal: despidos hormiga ininterrumpidos de choferes más antiguos y activistas, por personal joven, más económico y sin experiencia gremial. A esto se agrega toda una acción revanchista contra luchadores de la vieja guardia, como fue el despido de los compañeros de Barracas que reaccionaron ante la muerte de David Ramallo por negligencia patronal y la judicialización de activistas de la gran huelga de 42 días del 2015, que están al borde de la condena y la cárcel. Una amenaza patronal de solicitar un Preventivo de crisis y el cierre de varios ramales, jugó como un chantaje para imponer su política de disciplinamiento gremial


En todo este período no hubo una respuesta del cuerpo de delegados acorde con dicha ofensiva patronal. Diversas fracciones que responden a distintas corrientes político-gremiales –incluyendo una afín a la burocracia de Fernández – han coincidido en evitar la acción directa limitándose a los recursos judiciales ante despidos y procesos. Coincidiendo de hecho con la prédica de las centrales obreras de depositar expectativa en un próximo gobierno F – F.


La renovación del cuerpo de delegados es una oportunidad para que los delegados y activistas críticos de esta pasividad se reagrupen en la presentación de una lista antipatronal combativa. Incluso si se realizara como en otras oportunidades una interna previa por tachas, para arribar a una propuesta unificada, la presentación pública de una lista de postulantes del activismo luchador con un programa y una agenda de acción, sería un punto de partida para un camino de recuperación de la mejor tradición combativa de la 60. Ni un despido más, desprocesamiento de los trabajadores judicializados; renovación de la flota obsoleta; no al cierre de ramales ni cabeceras;  recuperación de comedores e instalaciones sanitarias; comisión de seguridad e higiene con potestad de interrumpir tareas riesgosas.