Como veníamos señalando, el “reglamentazo” antidemocrático impuesto por la comisión directiva de Alesso, con el que han eliminado el criterio de “un docente, un voto” y la asamblea provincial y los han reemplazado por una reunión trucha de secretarios generales y un voto ponderado por departamento, sería el instrumento, fraude mediante, para imponer a la docencia santafesina una oferta salarial de miseria acordada con el gobernador Omar Perotti y el Frente de Todos.

La conducción celeste, al igual que sus socios en el MOS (reagrupamiento sindical kirchnerista), Jorge Hoffmann de ATE Provincial y Molina de UPCN, han jugado de esta manera como una pata fundamental del “Pacto Social” con el que los gobiernos están descargando la crisis sobre nuestras espaldas, los trabajadores.

El acuerdo, con sumas en negro que parten de los $4.000 para el salario inicial, representa de conjunto un 14% de incremento, en sintonía con los acuerdos cerrados por las burocracias de los gremios estatales a nivel provincial y nacional, contra una inflación ya acumulada del 20% y una proyección del 40% para fin de año, que llevará a más docentes a la condición de pobres. Una realidad que contrasta con los aumentos de hasta el 60% para la policía que utiliza Perotti para reprimir luchas salariales como la de lxs trabajadores de Algodonera Avellaneda.

Las sumas en negro (no remunerativas, ni bonificables), prohibidas en nuestra provincia por ley, pero habilitadas por la Ley de Necesidad Pública de Perotti, representan un mazazo a nuestra obra social de por sí ya desfinanciada y a la caja de jubilaciones que el gobierno pretende liquidar, vía la armonización.

La propuesta es un robo monumental a los catedráticos, para quienes  establece un criterio de equivalencia de 30 horas cátedra = 1 cargo, cuando corresponde que sean 15 horas. Por otra parte, el escalonamiento segmentado achata la escala salarial, destruyendo el nomenclador docente.

Por si fuera poco, al mismo tiempo de conocerse la imposición fraudulenta de esta propuesta, se conocía el veto de Perotti a la ley de salario de emergencia para lxs reemplazantes arrancada a la legislatura, tema que había sido dejado de lado por la burocracia en la reunión paritaria.

Fraude por donde se lo mire

La estrategia de estas direcciones para imponer este retroceso fue la de avanzar por la línea de menor resistencia. Por eso, a diferencia de lo que suele suceder año a año, en esta oportunidad prepararon el terreno cerrando primero la paritaria estatal aprovechando que no existe allí una oposición fuerte que cuestione a las conducciones de estos gremios, para avanzar después en el gremio docente donde los sectores de la oposición hemos llegado a poner en jaque a la celeste con paros de las seccionales opositoras y acciones de lucha, superando el inmovilismo al que sometió al gremio durante meses, Sonia Alesso.

De todas maneras, la conducción celeste además de utilizar el “reglamentazo” para imponer el acuerdo, tuvo que recurrir al fraude.

El escándalo del audio que circuló de Faustino Erni, secretario general de Amsafe Las Colonias, tratando de hacerles creer a las y los jubilados que sólo podrían votar por la aceptación (cuando incluso, desde la celeste defienden una interpretación estatutaria por la cual no le permiten el voto a lxs jubiladxs), es una muestra de ello.

Por otra parte no pudieron dejar de lado la obscenidad para imponer el acuerdo. Mientras que en el conjunto de los departamentos votó (tanto en los del oficialismo, como en los de la oposición) en promedio un 50% del padrón, en la seccional de La Capital, dirigida por la celeste, votó el 100% de sus 6400 afiliados, es decir, ¡todo el gremio, inclusive todxs lxs jubiladxs! Algo prácticamente imposible. Por si fuera poco, ni siquiera dieron a conocer los resultados de la votación de todos los departamentos. El nivel de fraude es escandaloso.

La conducción de Sonia Alesso ha llevado al límite su política de vaciamiento de nuestro gremio y de intento de regimentación de los movimientos de lucha que surgen en su seno.

Lo que el “reglamentazo” no pudo ocultar

El fraude y las maniobras de la burocracia, sin embargo, no pudieron ocultar el enorme rechazo a la propuesta en todos los departamentos de la provincia, al menos de los que se conocieron los resultados. De conjunto en los departamentos dirigidos por la burocracia, como Constitución, San Jerónimo, 9 de julio y General Obligado, el rechazo rondó el 45% de los votos. En Castellanos, la aceptación tuvo apenas 31 votos más que el rechazo (685 a 654 votos).

El caso del departamento San Lorenzo es elocuente. Allí hubo dos mociones de rechazo, la mayoritaria impulsada por un frente único de oposición (que integró Tribuna Docente, junto a docente autoconvocados) que obtuvo 509 votos y la moción presentada por el grupo de Altamira, que en un actitud sectaria, funcional a la burocracia, dividió a la oposición con 220 votos permitiendo que Fernández se sirviera del “reglamentazo” e impusiera la aceptación, minoritaria, con 618 votos.

Estos números dan cuenta de que en condiciones de una asamblea provincial, aún en la virtualidad, esta propuesta de retroceso histórico, no hubiese podido ser impuesta.

El rol de la oposición y las tareas planteadas

El “reglamentazo” de Alesso y cía. puso a la docencia santafesina y fundamentalmente a las direcciones de la oposición que integran la “4 de abril”, en una encrucijada. Este, vino a ponerle un freno al proceso de lucha desenvuelto a partir de la coordinación entre las cuatro seccionales opositoras que incluso había comenzado a generar un reagrupamiento de un activismo antiburocrático que fue surgiendo en distintos puntos de la provincia ante el inmovilismo de la burocracia. Sin embargo, la propia negativa de las conducciones de estas seccionales opositoras a profundizar este proceso de reagrupamiento y de lucha le ha dejado el terreno allanado a la burocracia para imponer con todo el peso del “reglamentazo” una derrota paritaria mayúscula. Las conducciones de los departamentos opositores terminaron adaptándose al “reglamentazo”, no por concurrir a las reuniones de secretarios generales en las que se fisonomiza este, sino por no generar una alternativa a este.

Desde Tribuna Docente venimos impulsando una política de frente único de la oposición, y junto a esto venimos planteando la necesidad de profundizar el proceso abierto por los cuatro departamentos opositores, convocando a Plenario Provincial de delegadxs con mandato de escuela que opere como una instancia de reagrupamiento al interior del gremio sobre la base de la resolución de iniciativas de lucha y un programa. Un reagrupamiento a nivel provincial que plantee la anulación del “reglamentazo” y la restitución inmediata de la asamblea provincial.

La paritaria de miseria impuesta por la burocracia de Alesso, vía el “reglamentazo” y fraude de por medio, marca un retroceso histórico en nuestras conquistas y constituye momento bisagra en AMSAFE. A esta excepcionalidad, desde la oposición antiburocrática debemos oponerle medidas que estén a la altura de las circunstancias.

La “4 de abril” no puede ser un sello electoral

La orientación que hoy predomina en el campo de la oposición docente es la de la CTA Autónoma de Gustavo Teres, una central que al igual que las demás, se ha subordinado a la política de ajuste de Alberto Fernández. En sintonía con la orientación más general de esta central a nivel nacional, este sector, le ha bajado el pulgar a una política de desborde y de confrontación directa con la burocracia y el gobierno. A tal punto, que a instancia de este sector, la Amsafe Rosario se ubicó por fuera de convocatorias importantes de las últimas semanas como las de la jornada nacional de jubiladxs del pasado 23/9, o la movilización de docentes reemplazantes contra el veto de Perotti que tuvo lugar en Rosario y otros puntos de la provincia.

La orientación de este sector, compartida por el conjunto de las conducciones de las seccionales opositoras no es la impulsar un plan de lucha de la oposición hasta derrotar los ataques del gobierno, sino la de ir “debilitando” a la burocracia no importa a qué costo para la docencia. Una línea de subordinación de nuestros reclamos, a una orientación electoralera.

Todo lo contrario a lo que demostraron los docentes reemplazantes que sin contar más que con las redes sociales y la voluntad de luchar contra el veto de Perotti, se autoconvocaron y ganaron las calles de manera urgente en Rosario, San Justo, y La Capital.

Desde Tribuna Docente, llamamos a las seccionales opositoras y a todo el activismo antiburocrático de la provincia a desenvolver la perspectiva de un Plenario Provincial de delegadxs para defender una AMSAFE democrática, que luche por la defensa de una educación pública, laica y gratuita.