Las repercusiones del paro internacional de los trabajadores de reparto, realizado el pasado 22 de abril, sirvieron para concentrar al activismo de todo el país a través de grupos de Whatsapp, páginas de Instagram y Facebook.

A partir de que cientos de trabajadores coincidimos en caracterizar que la crisis sanitaria agudiza nuestra precarización laboral, se convocó a una asamblea virtual de la que participaron trabajadores de las principales de apps (Pedidos Ya, Glovo, Rappi, Uber Eats) y de deliverys, de Santa Fe, Neuquén, Bariloche, Córdoba, Catamarca, Mar del Plata, La Plata, Caba y distintos puntos del Gran Buenos Aires.

Allí se resolvió una nueva jornada de paro de repartidores, con movilizaciones, caravanas de deliverys y concentraciones en todo el país para el viernes 8 de mayo, desde las 10:00 hasta las 16:00, para exigir a las empresas de apps un 100% de aumento en el pago por pedido y la provisión de elementos de seguridad e higiene. Otro reclamo es la reactivación de las cuentas bloqueadas de manera arbitraria por las empresas como forma de persecución. Como parte de la jornada se realizará al mediodía una movilización al Ministerio de Trabajo (Av. Callao 114) en Capital Federal. Es un paro activo.

También va a estar presente el reclamo de justicia por Emma y Franco, dos repartidores fallecidos mientras trabajaban en las últimas dos semanas. Exigimos que las empresas se hagan cargo de nuestra ART y de los gastos de sus familias.

Las patronales sintieron el efecto de la medida de fuerza del 22 y su impacto mediático. Algunas habilitaron bonos, incentivos y premios, e incluso entregaron algunos materiales de higiene. Son medidas insuficientes, no solo por la situación que estamos viviendo los trabajadores sino además a la luz de que las empresas están ganando millones por la cuarentena.

Desde Argentina incentivamos a los colectivos de trabajadores de reparto de otros países que también se están organizando a discutir nuevas medidas y sumarse a convocar nuevamente un paro internacional para seguir reclamando contra la precarización laboral y en defensa de nuestra salud y nuestras vidas.

El movimiento está en ascenso, es ahora compañeros.