Sindicales

6/9/2020

Represión, patotas y balas en el Puerto de Buenos Aires

En medio de las negociaciones paritarias las empresas montaron una provocación y convocaron barrabravas armados.

Agrupación Clasista Naranja Portuaria

En medio de las negociaciones paritarias en el Puerto de Buenos Aires, que ya llevan más de tres meses sin solución, las operadoras portuarias montaron desde el pasado sábado, una provocación contra los trabajadores estibadores negándose a convocarlos a trabajar y reemplazandolos con personal fuera de convenio y ajeno a la actividad. Para esto, quebrantaron la conciliación obligatoria dispuesta por el Ministerio de Trabajo y aún vigente.

Esto suscitó que los trabajadores se convocaran en los portones del puerto donde fueron sorprendidos por un fuerte operativo de Prefectura Naval, coordinado entre el gobierno y las empresas, para impedir el ingreso de los estibadores y hacer pasar la maniobra. El propósito es que los estibadores, nucleados en el Supa (Sindicato Unido Portuarios Argentinos), firmen los términos paritarios que imponen unilateralmente las empresas.

No suficiente con esto, Prefectura Naval persiguió y detuvo a trabajadores y delegados gremiales que habían ingresado al establecimiento para hacer valer sus derechos contra la medida antisindical de las operadoras, apañada por el gobierno nacional. Los mismos fueron demorados durante horas y se les labraron actas con delitos de los más “creativos”.

Vista la persistencia de los estibadores en los portones de las terminales portuarias y la solidaridad de los trabajadores apuntadores, guincheros, y otros, que se negaron a ingresar al puerto por medio de una “lancha clandestina”, la respuesta obrera fue cobrando fuerza y desbaratando la maniobra patronal. Esto motivó a que en horas de la madrugada un grupo de matones, que se autoidentificaron como pertenecientes a la brrabrava del club River Plate, arribaran en distintos autos a intentar disolver por la fuerza la permanencia de los trabajadores.

Esta patota atacó físicamente a los trabajadores y luego le propinó un disparo en el tobillo a un trabajador, tras lo cual huyeron de la escena, alguno de ellos buscando refugio al interior de la misma terminal portuaria, lo que revela los vasos comunicantes entre la patota y las empresas.

La Prefectura Naval, que se encontraba en el lugar de los hechos, permitió actuar a esta patota impunemente, no detuvo a quien realizó los disparos y le dio refugio a los barrabravas, replicando el accionar de la Policía Federal en los hechos que llevaron al asesinato de Mariano Ferreyra. Si procedió, en cambio, a detener nuevamente a varios trabajadores.

La paritaria del Puerto de Buenos Aires atraviesa una larga agonía, signada por la intransigencia de las patronales, la orientación propatronal del gobierno (AGP, Ministerio de Transporte, Ministerio de Trabajo, Prefectura) y por las vacilaciones de una dirección que se niega a convocar a asambleas de trabajadores y a unir los distintos procesos de lucha que se vienen gestando al interior del puerto y que reúnen a estibadores, apuntadores, guincheros, mercantes y portuarios detrás de un mismo objetivo.

Desde la Naranja Portuaria rechazamos esta nueva provocación patronal y las actas labradas contra todos los compañeros detenidos por Prefectura; denunciamos el reforzamiento represivo del puerto en manos del gobierno y la complicidad con las patotas sindicales; deben investigarse a fondo los vínculos de esta patota con las empresas, identificando a todos sus integrantes y a los responsables de las “fuerzas de seguridad” que les permitieron actuar. Fuera las patotas y barrabravas. Abajo las maniobras de las patronales y el gobierno. Por la unidad de todos los portuarios con el método de la asamblea general y un plan de lucha para ganar.