El corte que hasta hace minutos desarrollaban rurales y empacadorxs en Villa Regina sobre ruta 22 a la altura de la aduana se acaba de trasladar a la salida de la ciudad de Chichinales a la altura del gauchito gil, también sobre ruta 22; es decir, la única entrada al valle de Río Negro y Neuquén que existe.

Los trabajadores y trabajadoras mantienen un corte intermitentemente levantándolo cada una hora porque saben que los motivos sobran: el Estado acaba de reducir a cero las retenciones a la patronal del sector y sigue sin reconocer la zona desfavorable para rurales y empacadorxs, entre otros sectores, mientras los secretarios generales sí la cobran. Por otro lado, la misma burocracia que goza de ese privilegio estira la negociación paritaria. Los salarios ya son de pobreza y la desocupación es un denominador común, así como la temporalidad. En dichas negociaciones las burocracias se jactan de pelear por la zona desfavorable, pero al día de hoy no hay ningún tipo de avance.

Se exige desde parte de las bases la convocatoria de las direcciones sindicales a un paro general de todo el sector obrero frutícola para conquistar en las calles con cortes de rutas y piquetes el plus por zona desfavorable que el Estado y la patronal niegan. Esperan alguna comunicación del gobierno provincial con el gobierno nacional que destrabe el conflicto y otorgue de una vez el derecho que por ley corresponde. También exigen la renuncia del secretario general Pablo Cariman de la seccional de Villa Regina y nuevas elecciones.

Todo el apoyo. Los y las trabajadoras entienden que la zona desfavorable se gana en las calles.

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