Un paro y movilización de 1000 docentes y 300 estudiantes, organizados en sus centros de estudiantes y con Amsafe de Rosario rechazó en la calle la evaluación organizada por el gobierno (Operativo Aprender 2017). La amenaza de lluvia no detuvo el impulso de docentes y estudiantes, que fue abonado por el rotundo fracaso del Operativo Enseñar el pasado 31 de octubre.

 

Estas evaluaciones nada tienen que ver con “mejorar la calidad educativa” sino que vienen a responsabilizar a la docencia, al alumnado y a la comunidad educativa del vaciamiento educativo y por lo tanto, a plantear la necesidad de avanzar en una reforma que adapte aún más la escuela pública a las necesidades empresariales y utilizar así a estudiantes como mano de obra barata.

 

En las secundarias y aún las técnicas, el Operativo Aprender fue un fracaso rotundo, y en las primarias fue muy importante. En las escuelas tuvo un fuerte impacto la campaña desarrollada por Amsafe Rosario con una carta a los padres de los alumnos, ya que el ausentismo fue muy importante y clave para que el Operativo Aprender no pase.

 

Esto fue acompañado de spots pagos por nuestro gremio, en espacios televisivos y radiales centrales, y una carta dirigida a los estudiantes secundaria. Todas estas medidas fueron resueltas en un plenario departamental de delegados que tomó la iniciativa para llevar adelante un rechazo efectivo al Operativo Aprender en las escuelas.

 

De esta manera, nuestro gremio recuperado tomó la bandera de la defensa de la escuela pública, llevando a la práctica lo que la burocracia de Sonia Alesso se niega a hacer.

 

Otras acciones de rechazo fueron organizadas por Tribuna Docente en San Lorenzo y Santa Fe con radios abiertas y volanteadas. Todas las actividades tuvieron una alta repercusión mediática, con notas periodísticas y comentarios.

 

El Operativo Aprender encontró a la conducción Celeste en completo inmovilismo, y convocando a una reunión de Comisión Directiva ampliada por la tarde, con el resto de los delegados seccionales, para tomar posición. Muestra así su completo agotamiento para enfrentar seriamente la ofensiva del gobierno de Macri y la complicidad de los gobernadores.

 

La otra reivindicación tomada por la movilización docente fue contra la reforma previsional impulsada por el gobierno. Los jubilados docentes encabezaron la marcha defendiendo las conquistas previsionales que representan el régimen opcional docente, ahora amenazado por las reformas planteadas desde el gobierno, y que acompaña el gobernador Miguel Lifschitz (estos cambios han incluido la modificación en la fórmula de cálculo de las jubilaciones con el que confiscarán 100 mil millones de pesos a los jubilados en apenas un año).

 

A continuar la lucha

 

Sin duda, la iniciativa de tomar el camino de la movilización, frente a la declaración de guerra de Macri y los gobernadores resultó un acierto. La acción fortaleció el espíritu de lucha de los compañeros y seguramente profundizará la organización de estudiantes secundarios y docentes para enfrentar lo que viene en materia de ataque a la escuela pública.

 

Docentes y estudiantes, unidos adelante.

 

Vamos compañeros.