La Comisión Directiva de Amsafe Provincial pactó con el gobierno de Miguel Lifschitz un “bono burla” a todos los docentes (inferior a los $3.000), sólo que pretendió hacerlo pasar como una decisión unilateral de éste, porque sabía de antemano que difícilmente podría imponerlo de otro modo.

 

La excusa de que no era un acuerdo paritario se cae cuando todas las direcciones de los gremios estatales, incluidos los municipales agrupados en la FESTRAM, aceptaron estos montos después de dos reuniones sucesivas.

 

Pero si algo faltaba para desnudar este acuerdo, es la nueva discriminación a los jubilados docentes, que sólo recibirán $1.000, mientras que los jubilados municipales, en particular los de Rosario, acordaron $ 2.296 (el 82% de un bono de $2.800).

 

Saquemos todas las conclusiones: con estas direcciones agotadas, tanto la de Ctera, como la de Amsafe, que están dejando pasar el ajuste de Macri y Lifschitz, nuestra lucha no tiene futuro.

 

El camino es un plenario provincial de delegados y una dirección políticamente independiente del gobierno y los partidos patronales. Estas tendencias se expresaron  recientemente en el multitudinario acto del Frente de Izquierda en la cancha de Atlanta y volverán a expresarse en la movilización del 20 de diciembre en Plaza de Mayo, cuando se cumplan 15 años del Argentinazo.