Sindicales

21/3/2020

Santa Fe: cómo se organizan las escuelas frente al coronavirus

Un balance para la lucha que se viene

Secretaria Adjunta de Amsafe Rosario

Luego de que los gobiernos nacional y provincial declararan la suspensión de clases, pero con los y las docentes cumpliendo horario casi completo, se abrió una ventana de dudas, problemas e incertidumbres que las y los trabajadores de la educación fuimos afrontando, emprendiendo un camino de auto organización ante la enorme precariedad de escuelas y comedores, que al día de hoy -con la cuarentena completa ya declarada- no se ha resuelto.


El lunes 16 de marzo las cientos de escuelas del departamento Rosario fueron un caos. Los equipos directivos recibían infinitas cantidad de circulares desde el Ministerio de Educación provincial que dirige Adriana Cantero, con indicaciones encontradas y en muchos casos contrapuestas, que exponían a las y los compañeros a la presión de supervisores que borraban con el codo las aparentes medidas de protección emanadas desde los máximos órganos de gobierno. La docencia tuvo que debatir cómo organizarse para garantizar sus labores y al mismo tiempo protegerse ella misma de la pandemia.


Tomando las riendas de la situación, empezamos por discutir los métodos para garantizar la continuidad pedagógica pero defendiendo la salud de de lxs compañerxs. Como aún no existían las especificaciones del caso, discutimos relevar primero a quienes pertenecían a los grupos de riesgos, luego a los adultxs con niñxs a cargo y de a poco a todo el personal docente para evitar la presencia en las escuelas, es así que se fueron organizando guardias mínimas, de entre 4 y 7 docente por turnos. Todo esto, mientras continuaban las presiones gubernamentales para que todo el personal asistiera a las escuelas o presentara certificados al tiempo que se desalentaba ir a centros de salud y hospitales para evitar la saturación del sistema de salud. Lxs maestros que saben mucho de organizarse en situaciones extremas, le dieron una lección categórica a un gobierno que se encuentra en cuarentena desde que asumió.


Llegando casi a mitad de semana el Ministerio resolvió desobligar a lxs docentes, enviando una circular a altas horas de la noche. Una medida de defensa elemental que desde el sindicalismo combativo planteamos desde el minuto cero, aunque con fuertes debates, por la presión de la que somos víctimas de forma recurrente al respecto del deber que tendríamos los docentes de atender todas las demandas sociales insatisfechas (alimentación, relevo del estado de vacunación y salud de lxs chicxs, situaciones de abuso y un largo etcétera).


Decretazos: organización de la docencia y asistentes escolares


En medio de este festival de decretos, el gobierno exigió a las escuelas que contaran con un comedor no cerrar sus puertas. Un servicio que este último tiempo, de crisis y de hambre, ha aumentado notoriamente. Pese a que ha caído la concurrencia, actualmente en las escuelas de la periferia asisten entre 200 y 400 niñxs por día.


En la circular Nº 6, la ministra establece la entrega de viandas y un menú estipulado para los 5 días de la semana, que las asistentes escolares y los equipos directivos son responsables de garantizar, en su armado y distribución. El personal debe comprar los elementos para armar las viandas, así como los artículos de higiene, con un presupuesto que no alcanza para comprar los materiales plásticos necesarios, ni alcohol en gel ni barbijos. El refuerzo presupuestario recientemente decretado es insuficiente y las famosas viandas, o no existen, o son el fruto de una creciente improvisación y objeto de racionamiento, dado que no alcanzan.


En el reciente anuncio del gobierno provincial, el personal directivo -pese al esfuerzo que está realizando- quedó excluido del refuerzo de 3000 pesos por única vez para el sueldo de marzo. Las asistentes escolares lo reciben, sobre un salario que sigue estando no obstante ello por debajo de la línea de pobreza. Las docentes que están yendo a las escuelas parar colaborar de manera solidaria, recibieron como contrapartida la suspensión de las paritarias.


La crisis se afronta con recursos. Exigimos al Estado provincial que envíe los recursos para cumplir con el menú establecido por la circular: alimentos en variedad y calidad, elementos plásticos en cantidad necesaria, barbijos, guantes y alcohol en gel y todos los elementos de higiene para lxs trabajadores y niñxs que asisten a los comedores. Aumento de emergencia y defensa de la cláusula gatillo para todxs los trabajadores de la educación. Contratación del personal faltante, bajo convenio, para armar las viandas.


Sabemos que somos las y los trabajadores de la educación quienes estamos al frente de la situación y sostenemos la escuela publica. Exigimos que el gobierno dé los recursos.