El gobierno de Perotti, a través de la Ministra de educación Adriana Cantero, ratificó la revocación de más de 500 cargos docentes que fueron titularizados a fines del 2019 durante la gestión del Frente Progresista.

Además del avasallamiento que implica esta avanzada del gobierno de Perotti sobre la estabilidad laboral adquirida legítimamente por cientos de trabajadores, el hecho de que se anulen resoluciones emanadas del seno de un acuerdo paritario reviste un antecedente de suma gravedad ante la posibilidad de poner en riesgo en adelante los acuerdos conquistados en este marco . Para avanzar en su línea, el gobierno de Perotti hace un uso indebido de la “Ley de responsabilidad fiscal”, a sabiendas de que toda ley tiene un efecto prospectivo y no retroactivo, por lo cual no puede aplicarse sobre un hecho ocurrido antes de su promulgación.

El hecho de que se eche mano de esta ley, debe alertar al movimiento docente ante la posibilidad de que en sintonía con la política de ajuste educativo que viene desenvolviendo el gobierno, se vaya a un desguace de horas y cargos que ponga en riesgo la estabilidad laboral del conjunto.

La burocracia, siempre con el poder de turno

A nadie se le escapa que estas titularizaciones fueron llevadas adelante de una manera inusitadamente “express” por parte del gobierno del Frente Progresista antes de su retirada, lo cual estuvo ligado a su intención de aprovechar estos concursos para incorporar a planta a parte del personal político ministerial, ligado a su conducción. Fue así, por ejemplo, que se crearon cargos cuya designación fue discrecional, o cargos de ascenso que se titularizaron sin mediar las instancias correspondientes de antecedentes y oposición. Ahora bien, estos casos puntuales no pueden ser la excusa para revocar el conjunto de las titularizaciones.

El incumplimiento en algunos de los procesos concursales, de las normas que debieran garantizar transparencia y una total equidad, contó con la complicidad de Sonia Alesso y la conducción provincial de AMSAFE, ya que todo esto fue acordado como es de costumbre a espaldas a la docencia. Estamos ante un acontecimiento que pone claramente de manifiesto que los contubernios entre las conducciones sindicales burocráticas y los gobiernos de turno, siempre favorecen a estos últimos perjudicando los intereses generales de las y los trabajadores.

La revocatoria de la totalidad de los cargos puso además en evidencia las divisiones internas de la burocracia de "Trabajadores de la educación", que expresa los acuerdos espurios entre la Celeste y los sucesivos gobiernos.

Por un lado, toda un ala de la celeste, más ligada al PJ y al perottismo ha salido a defender la medida del gobierno, apoyando la vulneración del derecho a la estabilidad adquirida legítimamente por la mayoría de lxs trabajadorxs. No es casualidad, que en este sector, en el que se inscriben las agrupaciones nucleadas en el “Encuentro por una educación para Todos”, algunos de sus dirigentes, entre ellos miembros de Comisión Directiva Provincial de AMSAFE hasta hace muy poco, se hayan convertido en funcionarios del gobierno de Perotti o estén en vías de hacerlo.

La otra parte de la celeste, con la agrupación “Trabajadores de la Educación” y Sonia Alesso a la cabeza, plantean el rechazo de la medida para ocultar que fueron ellos quienes garantizaron toda una serie de concesiones al gobierno del Frente Progresista en una paritaria entre cuatro paredes, para favorecer en algunos casos puntuales un reforzamiento de personal jerárquico que favoreciera intereses particulares de un sector de la burocracia. Estos desmanejos allanaron el terreno al ataque de Perotti.

En un caso y en otro, lo que queda claro es la subordinación permanente de la conducción de la celeste a los gobiernos de turno, ajena a una organización independiente de los reclamos e intereses de las y los trabajadores.

Defendamos la estabilidad laboral de lxs compañerxs

Desde Tribuna Docente, planteamos el rechazo a la medida del gobierno de Perotti y defendemos la estabilidad laboral adquirida de manera legítima por el conjunto de quienes son trabajadores de la educación, muchos de lxs cuales p han renunciado a horas que poseían para acceder a la estabilidad.

A su vez, rechazamos la titularización de personal político y de cargos de ascenso sin el debido proceso concursal y hacemos responsables al gobierno saliente y a la conducción de Sonia Alesso que fue cómplice. Planteamos la anulación de la revocación compulsiva de cargos y que todo caso anómalo puntual sea revisado en instancia paritaria por una comisión de seguimiento con paritarios elegidos por las bases. Sólo así, y mediante la lucha, podremos garantizar la defensa de los intereses genuinos de la docencia santafesina.

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