Sindicales

8/1/2017

Santiago del Estero: Despidos masivos en la textil Coteminas

Coteminas, textil de capitales brasileños, ha despedido más de 70 obreros en su planta ubicada en la ciudad de La Banda, Santiago del Estero (ex Grafa).


Los despidos vienen sucediéndose desde 2013/14, en modalidad “hormiga” (la fábrica, que llegó a tener más de 1000 operarios, ahora tiene alrededor de 600 trabajadores). A la vez, vienen teniendo lugar suspensiones y adelantos forzados de vacaciones por sector (lo que en junio pasado se extendió a toda la planta), junto a recortes de todo tipo. Ahora, con la profundización de la recesión industrial, los despidos ya son masivos, se cierran secciones (sábanas) e incluso comienzan a correr rumores de cierre: la patronal brasileña quiere hacer pagar la crisis a los trabajadores.


En 2004, tras la devaluación del peso argentino, los capitales brasileños adquirieron la vieja planta de Grafa a precio de ganga. Con la ley de “promoción industrial” zamorista, obtuvieron masivos subsidios y exenciones impositivas. Sin embargo, los obreros siguieron teniendo uno de los peores salarios del sector industrial y condiciones de trabajo paupérrimas.


El papel de la burocracia que dirige el gremio (Asociación Obrera Textil) es sencillamente vergonzoso: el secretario general de la AOT local, Gustavo Morales, se ha limitado a declarar su tristeza a los medios, y a justificar a la patronal, anunciando incluso que se vienen más despidos. La burocracia de la CGT dirigida por José Gómez no ha dicho “esta boca es mía”, en contraste con su actitud de permanentes declaraciones cuando se trata de apoyar al gobierno provincial.


Los despidos en la fábrica santiagueña también fueron mencionados a nivel nacional por la burocracia de la AOT ahora dirigida por Hugo Benítez. Sin embargo, a pesar de que el propio burócrata reconoce que también Alpargatas está despidiendo y suspendiendo (amenazan con cerrar la planta de San Luis, ver Clarín 4/1/17), no hay ni un amague de lucha, cuando correspondería un paro general y plan de lucha a nivel nacional por la defensa de los puestos de trabajo. En lugar de defender la agenda de los trabajadores textiles, la burocracia se ha puesto a defender a las patronales, solicitando el cierre de las importaciones y estímulos estatales al consumo (en criollo: más subsidios). No corresponde que los trabajadores hagan las veces de defensores de la patronal precarizadora, en todo caso debe plantearse que, así como intervino para subsidiar a la empresa brasileña, el Estado intervenga la empresa y prohíba todo despido. Ante el planteo de Coteminas de que sus cuentas no cierran, exigimos la apertura de sus libros contables bajo control de los trabajadores y la rendición de todos los subsidios y exenciones recibidos.


Por su parte, el kirchnerismo local pretende contrastar los despidos actuales con la política llevada a cabo en años anteriores: omiten maliciosamente que en los últimos 3 años del gobierno de CFK se habían perdido ya cientos de puestos de trabajo.


Los trabajadores deben exigir a la AOT un paro general hasta que se reincorpore a todos los compañeros; pero sería un suicidio condicionar el futuro de las familias trabajadoras a esperar la iniciativa de la burocracia sindical entreguista, que ha sido cómplice de cientos de despidos en los últimos años. Una asamblea general autoconvocada de los trabajadores podría organizar un plan de lucha para revertir los despidos de hoy y evitar los que se anuncian.