En su última asamblea, el gremio docente mayoritario de la provincia de Santiago del Estero resolvió exigir a la CGT nacional la convocatoria a un paro general  para el próximo 7 de marzo.

 

La moción, propuesta por Tribuna Docente y aprobada por amplia mayoría, se fundamentó en la consideración de que el ataque a las paritarias docentes es un caso testigo por parte del gobierno nacional para imponer el ajuste al conjunto del movimiento obrero. También se tuvo en consideración que la histórica huelga provincial docente del año pasado, que duró dos largos meses, no obtuvo su reclamos debido al aislamiento al que la sometió la burocracia sindical nacional, de lo que se debe extraer el balance de la necesidad de una lucha unitaria de los trabajadores a nivel nacional.

 

Se consideró que la respuesta de la CGT de una movilización sin paro (y la promesa de un paro sin fecha) es menos que tibia, por lo que se exigió que la movilización del próximo 7 sea  en el marco de un paro nacional.

 

En la asamblea, los docentes santiagueños ratificaron su adhesión al paro nacional del 6 y 7, y se resolvió participar en las movilizaciones del 8 de marzo.