El 16 de julio se realizó un Plenario de secretarios generales de Ctera, con la presencia de 14 provincias.

El temario incluía, como punto central, la estrategia gremial que Ctera deberá adoptar en su próximo Congreso Ordinario del 15 de agosto. El Plenario se cerró después de un extenso debate, sin haber cumplido el objetivo de un ‘consenso’ que proclamó la Junta Ejecutiva en el inicio. La representación de Santa Cruz entregó una propuesta de plan de acción, cuyo eje es levantar el reclamo salarial, la lucha por la defensa de un estatuto nacional docente que contenga las conquistas de los estatutos anteriores, y la lucha contra la ‘reforma educativa’. El documento realiza una crítica al planteo del “financiamiento educativo”, a los fuertes compromisos políticos contraídos por Ctera con las bancadas parlamentarias patronales, que no han dado en contrapartida ningún resultado concreto, ni siquiera en los propios términos del citado financiamiento. La propuesta de acción inmediata consiste en la convocatoria de una gran Asamblea Nacional Docente con delegaciones de base de todo el país, para que en un evento de miles de compañeros se apruebe el programa y el plan de acción.

La Junta Ejecutiva de Ctera, por su parte, explicitó su política de continuar con el ayuno, cumplir con el paro del 8 de agosto y realizar alguna acción no definida el 11 de setiembre; defendió sus planteos de “financiamiento educativo” y su política de alianzas parlamentarias. Recién al final de la reunión entregaron a las representaciones provinciales un documento de la “política gremial de Ctera”.

Toda esta política choca con la proclamada lucha por la “derogación de la ley  federal”, consigna que el secretario general de la UEPC, Grahovac, reconoció les fue impuesta en el Congreso Pedagógico de febrero.

Considero de vital importancia desarrollar este debate y analizar las propuestas en danza en todas las escuelas del país, para propiciar un verdadero plan de lucha y una estrategia gremial independiente de los partidos patronales.