Se mantiene firme la ocupación de la UEP

El gobierno de Vidal quiere echar a 200 trabajadores

La permanencia en la sede de la Unidad Ejecutora Provincial (UEP) iniciada el 28 de diciembre sigue creciendo.


Esta semana, los trabajadores protagonizaron una gran movilización al Ministerio de Educación para reclamar contra los 200 despidos y por la estabilidad del resto de los 180 trabajadores del organismo. Los trabajadores de la UEP estuvieron acompañados por la Junta Interna de Educación y por ATE.


El gobierno de Vidal pretende “recontratar” a los 180 trabajadores que quedarían del organismo bajo los contratos basura que ampara la ley de emergencia administrativa de la provincia.


Esto significa que perderán los pocos beneficios con los que contaban hasta ahora (Ioma, reajuste por paritarias, aguinaldo, vacaciones) por contratos que vencen en mayo. El gobierno pretende negociar con cada trabajador de manera individual y desconoce a la Junta Interna y los delegados.


El 31 de diciembre, los trabajadores con sus familias organizaron la cena y brindis de fin de año en el cuarto día de permanencia en el edificio. El brindis reforzó la camaradería entre ellos. 


La ocupación de la UEP tiene una dimensión que trasciende la región frente a la ola de despidos en toda la provincia y marca el rumbo de la lucha obrera en la nueva situación política. La disolución de la UEP es la expresión concreta de la aplicación de la ley de ministerios, que es un instrumento de ajuste para cesantear a miles de empleados públicos bonaerenses. La ocupación también es la respuesta a la falta de un plan de lucha provincial centralizado y al boicot de las burocracias sindicales que acompañan el ajuste del gobierno macrista.


El sablazo contra la UEP es también un golpe a la educación pública y a la construcción y mantenimiento de las escuelas. La UEP es la dependencia provincial encargada de ejecutar las obras en las escuelas, construcción y reparaciones. La lucha contra la disolución de la UEP es una bandera de la defensa de la educación estatal contra ajustadores y privatizadores. 


Las donaciones de los trabajadores y de la población se multiplican cotidianamente, aumentando la solidaridad de clase y el apoyo y masificación de la lucha. Rodeemos de solidaridad la ocupación de la UEP.


Ningún despido. Continuidad de la UEP.


¡A defender la ocupación de la UEP y a rodearla de solidaridad! 


¡Todo por el triunfo de esta lucha!