En un plenario de delegados y activistas del gremio de Prensa se constituyó el frente Naranja-Gris, que enfrentará a la actual conducción de la UTPBA en las elecciones del próximo 1º de octubre.

La lista lleva a la cabeza a Norma Giménez, secretaria general de la interna del Popular; a Pablo Llonto, delegado expulsado por su lucha, por la patronal de Clarín, varias veces reelecto por sus compañeros aún fuera de la empresa; a Jorge Brodsky, delegado de La Prensa perseguido por la patronal de Fortabat; a destacados activistas de la reciente ocupación de Perfil, a compañeros de la Agrupación Independiente de Telam.

El frente se propone “Volver a tener un sindicato… recuperar la Utpba para los trabajadores, para convertirla en una herramienta que, con total independencia del Estado y los partidos del presente régimen, enfrente las políticas del Banco Mundial, el FMI y el Consejo Empresario… (de)… flexibilización laboral, privatización de las obras sociales, desguace de la educación y la salud públicas… (y)… de incesante expulsión de mano de obra, que busca llevar a las masas trabajadoras a la desesperación y reducir a polvo nuestras conquistas históricas”.

El frente denuncia que la actual conducción de la Utpba ha vaciado el sindicato; ha firmado acuerdos con el Banco Mundial para la desregulación de la obra social y se ha integrado a la patronal en empresas como La Maga o la escuela TEA de periodismo; firma acuerdos de pasantías (flexibilización) con monopolios de la comunicación.

En el programa del Frente se reclama contra los despidos y la defensa del Estatuto del Periodista; la vigencia de las 6 horas de trabajo y el reparto de las horas de trabajo sin afectación del salario; por una asamblea general del gremio para luchar por estas reivindicaciones. Contra la persecución gremial, penal y los crímenes de compañeros, cese de todos los procesos penales, reincorporación de los delegados despedidos y juicio y castigo a los asesinos de Bonino y Cabezas.