Con la presencia de 330 delegados inscriptos y un total de más de 500 compañeros, sesionó el viernes 4 el 1º Congreso Provincial de Delegados de Neuquén. Había sido convocado por una Asamblea General de Trabajadores para preparar la huelga general por tiempo indeterminado contra las amenazas de despidos y descuentos salariales que había anunciado el gobernador Sobisch.

Los ejes

Los planteos de los delegados marcaron tres grandes ejes: el rechazo a la entrega de la riqueza petrolera provincial a Repsol hasta el 2027; la necesidad de enfrentar el 17,7% de desocupación provincial y la amenaza de una nueva ola de despidos y reducción de salarios. Sobisch está negociando con la Alianza y el PJ una jubilación anticipada de estatales, que puede dejar en la calle a casi 2.000 compañeros y aumentaría el aporte de los trabajadores a la caja jubilatoria provincial (del 6 al 11%).

La huelga general

Una delegada docente del Mst volvió a criticar el planteo de la huelga general por tiempo indeterminado votado por la Asamblea de Trabajadores y reivindicó la necesidad de juntar firmas para la campaña nacional de la CTA por el seguro de empleo. Planteó la eventualidad de un paro de 48 horas si el gobierno efectivizaba sus amenazas.

Norberto Calducci, estatal (PO), retrucó que el planteo de huelga indefinida había frenado al gobierno en sus inminentes ataques contra los trabajadores.

En el cierre, Julio Fuentes, secretario general de la CTA, manifestó que la votación por la huelga general tuvo el valor de que fue declarada por una asamblea de 2.000 compañeros, y que mostró la decisión de lucha de los trabajadores. Si el gobierno hubiera avanzado en sus planes, si no pagaba, se habría parado la provincia. “Y el gobierno leyó bien el mensaje”.

Para Fuentes, el mandato de la Asamblea seguía vigente: si el gobierno reanudara sus ataques, se declararía el paro general.

Resoluciones

El Congreso votó apoyar la jornada de movilización de los docentes del lunes 7 contra la reforma educativa menemista en la provincia.

Declaró un paro general en Neuquén para el miércoles 9 en apoyo a la lucha de los desocupados y contra los intentos de aumentar el aporte a la caja previsional, así como votó enviar delegaciones a la “marcha grande”.

También se votó otra Asamblea General para “no más de 30 o 40 días” en uno de los principales estadios de la Ciudad, y llevar a allí 5.000 trabajadores. Para garantizar la masividad se declarará un paro general y se organizarán caravanas desde todos los pueblos.

Avanzar en la elección de delegados

También se planteó constituir Comités de Lucha en cada pueblo y realizar asambleas en cada una de las 23 localidades para seguir eligiendo delegados mandatados.

A instancias de Patricia Jure, delegada docente (Tribuna Docente) se ratificó la necesidad de una Comisión de Lucha central, que se reunirá todos los martes a las 18 horas en la sede del CTA.

El papel de la izquierda

El Mst tuvo una presencia muy reducida y sus posiciones contra la huelga general fueron las más derechistas.

El Pts, al igual que su fracción Democracia Obrera, no participó. Se llenan la boca hablando de Congresos de Trabajadores y no saben reconocer uno cuando lo tienen delante. Critican a la burocracia pero no se animan a dar batallas políticas concretas.

Llamó la atención de los asistentes la ausencia de los ceramistas de Zanón, que se habían comprometido a concurrir.

El Ptp también hizo mutis por el foro. ¿Sólo van a reuniones ‘multisectoriales’?

El PO llevó una delegación importante, con la presencia de delegados, y también se hizo presente con sus volantes, periódicos y afiches. Según informan los compañeros encargados, se vendieron 32 periódicos entre los asistentes.

El PO está a prueba, debería trabajar resueltamente por la próxima Asamblea de Trabajadores, en especial para sumar a los trabajadores de la construcción y del transporte, y a los de la fruta de la vecina Cipolletti y otras localidades rionegrinas.