Tras más de seis meses de lucha ininterrumpida para la reincorporación de los madereros de la neuquina MAM, su causa recibe el apoyo masivo de la población. La estrategia de desgaste con que la patronal y el gobierno trataron de aislarla no ha logrado su objetivo. Hoy la lucha de los obreros de MAM es una referencia popular.

Se trata de una lucha que desde el primer momento (cuestión clave) apeló a los métodos de la clase obrera ante el vaciamiento y cierre: inmediatamente se ocupó la fábrica; se organizaron piquetes, cortes de ruta, movilizaciones, fondos de huelga; se sumó la familia de los obreros activamente a la lucha; se convocó a la solidaridad de clase y montó un acampe frente a la fábrica tras el desalojo de los trabajadores.

La patronal de MAM, parásitos sociales

El fraudulento recurso preventivo de crisis que presentó la patronal, y que la Secretaría de Trabajo aceptó sin chistar, así como el chantaje antiobrero de las causas judiciales abiertas contra los obreros (con la complicidad de la burocracia sindical), han desnudado ante gran parte de la población el carácter de los métodos de los capitalistas y sus instituciones estatales.

Esta experiencia que los obreros de MAM y el activismo están realizando es una escuela donde se está educando la dirección del clasismo, y en la que están aprendiendo miles y miles de trabajadores de otras ramas y sindicatos.

Los obreros tenían razón: no había una crisis económica ni laboral en la empresa, al punto que aún tras desalojar la fábrica con  una violenta represión para luego militarizarla por semanas, la patronal ha tenido que reincorporar a cinco trabajadores y están otros diez en la lista de reingresos (tres de ellos comprometidos para el próximo lunes 20) –constituyendo esto una victoria parcial, pero victoria al fin, de los obreros madereros.

La patronal y el gobierno dilatan más reincorporaciones. La patronal, que alentada por la complicidad del gobierno mantiene hace semanas un fuerte grupo antimotines en el interior de la fábrica, alimenta la dilación con chicanas legales. Busca quebrar la voluntad del acampe, desde donde se organizan las actividades para el reingreso de los restantes comprometidos y el cobro de las indemnizaciones de ley para el resto.

Así la patronal finge una puesta en marcha en la “legalidad”, muy alejada de la realidad: mientras que la vuelta al trabajo de los suspendidos al inicio del conflicto ha sido bajo una relación laboral irregular (pérdida del ítem productividad, baja salarial, etc.) o directamente en negro, en estos días un obrero accidentado –a falta de ART– tuvo que concurrir a un hospital ante la pérdida de movilidad en una mano.

Nuevas acciones de lucha

MAM contabiliza otra victoria de tipo estratégica, ya que se inscribe en una cadena de otras luchas obreras ejemplares por sus métodos, como las recientes de AGR-Clarín y Pepsico, y más allá en el tiempo, las de la editorial Atlántida, la Ford de Pacheco y otras. Para la provincia de Neuquén, rescata la experiencia inicial de la ex Zanón.

Por más de seis meses obreros industriales marcan la tónica para la clase obrera de conjunto. Esto no podrá ser destruido jamás, cualquiera sea el devenir de los acontecimientos. Desde este punto de vista, la burguesía y el Estado capitalista, con sus chicanas judiciales y sus embates represivos, han fracasado rotundamente ante un puñado de obreros y sus familias, fundidos en un único tesón militante con los partidos de la izquierda, donde el PO tiene un protagonismo ejemplar.

Con los métodos obreros y la clara conciencia que estamos ante una lucha de clases, se enfrenta el plan de guerra de los capitalistas y el Estado.

Este jueves 18 habrá una nueva concentración frente al ministerio de Producción, y el viernes 19, una volanteada hacia la comunidad en el centro de Neuquén.

La lucha de MAM se abre paso hacia el futuro.

 

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