Sindicales

14/1/2020

Siderca: derrotemos los 191 despidos

La patronal no acata la conciliación obligatoria e impide el ingreso de los despedidos.

Luego de notificar los casi doscientos despidos de la planta de Siderca, ubicada en la ciudad bonaerense de Campana, el Ministerio de Trabajo de la provincia de Buenos Aires resolvió la conciliación obligatoria, que retrotrae la situación hasta antes de ordenarse los despidos, es decir, con el conjunto de los trabajadores adentro. Sin embargo, la patronal ha decidido desconocer el dictamen del ministerio e impedir el ingreso de los obreros a la planta, en una manifiesta violación de la conciliación obligatoria.


Estos despidos vienen precedidos por un esquema de suspensiones con reducción salarial y con una persecución patronal contra la organización sindical de la planta y su comisión interna. No es la primera vez que Siderca realiza este tipo de ataques a los trabajadores: ya en 2015, apenas asumió el gobierno de Macri, realizó una medida similar que dejó unos 189 compañeros en la calle.


El tan mentado Pacto Social se inaugura mostrando su absoluta esterilidad. Mientras se reclama que los trabajadores moderen sus reclamos y pretensiones, a cambio de cuidar sus fuentes de empleo, las patronales hacen y deshacen a su antojo para imponer las condiciones que le permitan aumentar su margen de rentabilidad. Quieren descargar la crisis que ellos mismos generaron sobre las espaldas de los trabajadores.


El cuadro que allana la hostilidad de la patronal contra los trabajadores, es la falta de una respuesta contundente por parte de la dirección de la UOM . El secretario general de la seccional, Abel Furlán, ya declaró que estaría dispuesto a aceptar la continuidad de las suspensiones, presentándolo como una salida frente a los despidos y adaptándose a las presiones de la patronal. Mientras que lo correcto sería exigir la apertura de los libros del grupo Techint al conjunto de los trabajadores. La convocatoria a asambleas, tanto por sector, como general; y el paro total de la producción; son las medidas urgentes que requiere el conflicto para avanzar en un desenlace favorable.


La expectativa en el Ministerio de Trabajo, con sus innumerables audiencias cuyas resoluciones luego no se concretan, es la vía para desgastar a los trabajadores y hacer pasar la política de la patronal.

El despido de estos 191 trabajadores también apunta a disciplinar al colectivo obrero dentro de la fábrica, imponiendo las condiciones patronales bajo la amenaza de nuevos recortes. Es lo que se viene escuchando por parte de la empresa, la cual prepararía nuevos despidos para el mes de febrero.


Se vuelve primordial desarrollar la deliberación en cada sector para involucrar al conjunto de los trabajadores en la lucha por la reincorporación de los despedidos. Solo una victoria contundente arrojará las condiciones para bloquear la ofensiva patronal y  garantizar la organización sindical y las reivindicaciones de los trabajadores.


Hay que preparar el paro de la planta y las distintas medidas de lucha para ganar el conflicto. Que se cumpla la conciliación obligatoria con los compañeros en su lugar de trabajo. Ningún despido en Siderca. Que se abran los libros del grupo Techint para conocer las ganancias que han amasado últimos años. Que la crisis la paguen los capitalistas.