Sindicales

27/5/2007|993

Sigue la persecución a los delegados

Complicidad de la Directiva de Comercio


Después de 600 despidos en los últimos tres años, después de las persecuciones gremiales y la violación de todos los artículos del convenio colectivo de trabajo, si algo le faltaba a la patronal de Coto era golpear a un delegado.


El sábado 19, después de acordar con la Interna el levantamiento de las persecuciones, el traslado del gerente de la sucursal 99 y el mejoramiento de los comedores, el propio gerente de la sucursal organizó, junto al jefe de seguridad, una provocación contra delegado Cristian Tonarelli. Lo amenazó, empujó y golpeó dentro de las instalaciones del supermercado.


Lo que está en juego


Para Coto se trata de frenar un proceso de lucha y organización que ya lleva más de un año. Los 80 días de carpa, los piquetes, los bloqueos, los actos, las denuncias sentaron un precedente contundente. Lo dice la asamblea de 70 compañeros en la sucursal 96 que desató el terror en la patronal. La empresa echó hace dos semanas a la mitad del personal jerárquico de esa sucursal; la noticia de 50 nuevos despidos puso a la base en pie de lucha, más allá de que la conducción del sindicato se encargó de que dicha asamblea fuera realizada a espaldas de la Comisión Interna y de que en ella no se votara ninguna medida de acción sobre la empresa.


La política de Coto es eliminar a todo el activismo para despedir libremente y empeorar las condiciones de trabajo. Pero está provocando una rebelión.


Cómplices


La dirección del sindicato de Comercio es cómplice. Su inacción fue fundamental para que Coto imponga en la empresa un campo de concentración. Primero aisló cada uno de los procesos de lucha; luego permitió que la empresa persiguiera a los delegados y activistas. Hasta miró para otro lado cuando se le prohibió, sin causa, el ingreso al delegado Tonarelli. No se presentó para apoyar a la Interna en las discusiones con la patronal. Cuando la asamblea de la sucursal 96 superó todas sus trabas, se hizo presente para proponer una carta al Ministerio de Trabajo… No son un sindicato; parecen una asesoría legal de la Cámara de Diputados de la provincia.


Pero con la victoria de Cavallieri en las elecciones de Comercio, la Directiva del sindicato decidió ir por más. Le han prohibido el ingreso al plenario de delegados a la mayoría de la Comisión Interna de Coto y a los delegados de Apex, para transformarlo en la “Comisión de acción gremial” en la que entran los que ellos quieren. Los que no pueden entrar son los delegados perseguidos de Coto y el compañero Cicotti de Apex, con un juicio de desafuero encima. Pareciera que la decisión de reventar a estos compañeros hubiera sido tomada en común por las patronales y la burocracia.


Que renuncie el gerente. Abajo los despidos y la persecución


El repudio de la base es inmenso. La Interna de Coto ha reclamado la solidaridad de todas las organizaciones y la convocatoria a un acto para reclamar la renuncia del gerente que agredió al delegado.


Exigimos a los dirigentes de Empleados de Comercio que asuman su responsabilidad en la defensa de los delegados gremiales y convoquen ya a una medida de fuerza. Que se permita en forma inmediata el ingreso de todos los delegados al plenario.


Exigimos a la CGT su inmediato pronunciamiento y el repudio a las medidas tomadas por la Comisión Directiva de Empleados de Comercio.


Que los socialistas del Municipio abran la boca, que el gobierno se pronuncie.


Apoyamos el llamado de la Comisión Interna de Coto a convocar a asambleas en el resto de las sucursales para exigir al sindicato un plan de acción inmediato.