Sin oferta salarial, avanza el pacto PRO-UTE

Tribuna Docente Capital - Lista Rosa nacional


Con la última reunión de Mesa Salarial y Condiciones Laborales, el 29 de enero, se confirmó que el “adelantamiento” de la discusión salarial es un acuerdo político entre la dirección kirchnerista de UTE-Ctera y el gobierno macrista. Avanzan en un acuerdo de ajuste contra los trabajadores de la educación para garantizar un comienzo de clases ordenado en un año electoral.


 


Nuevamente, el ministro de Educación, Esteban Bullrich, no hizo ninguna oferta de aumento salarial en espera de alguna “señal” del gobierno nacional. Igual que Scioli en la provincia de Buenos Aires, y a nivel nacional, preparan con la burocracia sindical (UTE, Suteba, Ctera) una paz social en medio de una transición política en crisis.


 


Se ratificó el 10% de aumento de bolsillo como “aumento a cuenta de la paritaria”, que implica un incremento de alrededor de 600 pesos por cargo testigo: 20 pesos de “aumento” por día para las familias docentes. Una burla aceptada por la dirección celeste de UTE.


 


El ministerio y la UTE volvieron a hacer una defensa cerrada de los últimos acuerdos, que han sido a la baja para el conjunto de la docencia. Defienden las diferenciaciones salariales a la baja que han dejado a miles de docentes por debajo de la garantía mínima y han provocado una desvalorización de la hora cátedra de dimensiones históricas. La dirección kirchnerista de la UTE acude así al rescate de Macri.


 


Echan lastre y atacan a los sectores combativos


En la reunión del 29 de enero, el ministro Bullrich hizo algunos anuncios de importancia.


 


Luego de una extensa lucha, producto de la cual los compañeros de los Equipos de Orientación Escolar obtuvieron la titularización, hoy han logrado una justa recategorización. El ministerio ha anunciado también que el cargo de miembro de equipo será equiparado con el de maestro secretario, algo que está explícito en el Estatuto Docente y constituye un reclamo histórico del sector y del sindicato Ademys.


 


Otro anuncio, en el sentido de lo planteado por la delegación de Ademys, es la recategorización de los bibliotecarios de nivel medio. Se había llegado al absurdo de que un bibliotecario de un colegio secundario cobraba menos que uno de primaria.


 


El macrismo ha ratificado una política discriminatoria y antisindical para con Ademys, única representación combativa en la mesa salarial porteña.


 


Sobre el intento de impugnación de los delegados de Ademys, volvieron a imponer una interpretación “literal” de la (en muchos artículos) inconstitucional Ley de Asociaciones Sindicales. Hicieron explícito que la negativa a reconocer a los representantes del sindicato como miembros permanentes en la Comisión de Salario y Estatuto era una “decisión política de la gestión, porque Ademys no respeta el vínculo con el ministerio”.


 


El macrismo busca aislar a Ademys y a los sectores combativos para tener el camino libre para un acuerdo con la dirección de UTE.


 


Llamamos al conjunto de la docencia a sacar las conclusiones sobre esta situación y a generar un proceso de organización y lucha por 11.000 pesos de inicial y 7.000 básico, en línea con el planteo de los Suteba combativos y el resto de los sectores antiburocráticos de todos el país.


 


Convocamos e invitamos a participar del Congreso Nacional de Tribuna Docente a realizarse los días 21 y 22 de febrero.