Todas las maniobras de las patronales para superar la crisis han fracasado.

CIADEA (Córdoba) ha puesto en marcha “retiros voluntarios” para lograr el despido de 1.200 trabajadores. Desde hace meses la patronal ha venido suspendiendo arteramente a los mismos compañeros, para “convencerlos” que la cesantía es irreversible.

SEVEL va en la misma dirección. En el resto de las terminales han cesado o se han reducido las horas extras y se anuncia el fin de los contratos. en las autopartistas, el ritmo de suspensiones y despdos es pavoroso.

La pregunta es: ¿qué está haciendo el sindicato?

Las patronales tienen una política: descargar la crisis sobre los trabajadores con despidos y suspensiones, reclamar nuevas prebendas al Estado (que se sumen a las excepcionales que ya existen: protección aduanera, rebaja de impuestos) y aprovechar la “volteada” para ir más fondo en la superexplotación de los trabajadores automotrices. Es la “línea”  que expresó Macri hace un tiempo y en nombre de todos: “ir a las 22,23 (horas actuales por auto) como en Europa”, eso sí, sin poner un mango para instalar la tecnología que allí se usa.

Frente a los despidos, los que ya están en marcha y los que se vienen: ¿qué está haciendo el sindicato?

José Rodríguez  acaba de presentar un proyecto en el Congreso, junto a Rodolfo Terragno (UCR), planteando la condonación (perdón) de las deudas impositivas de las patronales automotrices. Esto en plata contante y sonante significa un “ahorro” de 700 millones de dólares para un puñado de chupasangres a los que el gobierno les rebajó brutalmente los impuestos y que tampoco así los pagaron. José Rodríguez prefiere que los 700 millones vayan a Macri y no al seguro de desempleo, sin importarle, además que lo que dejan de poner las automotrices lo terminará pagando el pueblo con mayores impuestos al consumo, o mayor destrucción de la salud o la educación.

Este inmenso favor de José Rodríguez a las patronales no es desinteresado. Una parte de los fondos que las patronales se ahorren por el “perdón” irá la compra de acciones de las ART que “sugiera” el Smata. Las ART son las aseguradoras privadas encargadas de explotar los accidentes de trabajo (indemnizando poco a los trabajadores y cobrando bastante a las patronales).

No solo son cómplices del hundimiento del trabajador, ¡¡lucran con ese hundimiento!!

Frente a los despidos masivos, hay una salida:

* reducir la jornada de trabajo a seis horas sin reducir el salario, habilitando un cuarto turno de jornada para impedir los despidos y tomar nuevos trabajadores.

* control de los ritmos de producción, para terminar con la superexplotación que provocan las cesantías.

Las patronales automotrices han acumulado beneficios sin precedentes durante más de cuatro años. Los recursos para estas medidas de emergencia contra los despidos, existen.

Pasemos la factura, no dejemos que nos la pasen a nosotros. Paro activo contra los despidos, preparemos la huelga general.