Sindicales

10/4/2017

Solidaridad con los trabajadores de Télam y rechazo al informe de Wiñazki

La Naranja de Prensa


Desde La Naranja de Prensa rechazamos el informe presentado por Nicolás Wiñazki en la noche previa al paro general, en el cual el periodista afirmó que en la agencia estatal Télam “hay 200 empleados que responden todavía al kirchnerismo y que duplican a la redacción que ya había”. El informe vertido por Wiñazki, emitido desde el noticiero de Canal 13, hablaba de “la resistencia K en el Estado”.


 


Por un lado, detrás de lo enunciado por el periodista, hay un intento de estigmatización política, tal como señalaron los compañeros de la Comisión Gremial Interna-Sipreba de Télam. “Estas declaraciones, además de carentes de verdad, apuntan a poner en duda la idoneidad profesional de los trabajadores de prensa de la agencia que son sin embargo, quienes sostienen día a día el servicio periodístico”, denunció la CGI.


 


Pero el trasfondo sustancial de ese informe es el intento de crear las condiciones que justifiquen el despido de trabajadores en la agencia, en medio de la ofensiva del macrismo. Estamos, en otras palabras, ante una operación política.


 


No es casual, por eso, que el informe haya sido lanzado horas antes del paro, ya que la asamblea de trabajadores de Télam venía de pronunciarse contundentemente a favor de la huelga sin asistir a la redacción y de advertir que los despachos periodísticos, el material fotográfico, el portal web, el servicio radial y audiovisual que se iba a emitir el jueves 6 no cumpliría con los elementales estándares de publicación ya que la empresa iba a utilizar a “colaboradores” para reemplazar a los huelguistas y, en algunos casos, ni siquiera periodistas. Más de 900 trabajadores de la agencia se sumaron al paro general.


 


Es que en el debate desarrollado en las asambleas se abordó el tema de si no correspondía adherir al paro, pero cubriendo la información referida a él. Esta tesis fue rechazada prácticamente por unanimidad en Radio Nacional y en Télam al considerarse que, en un paro, los trabajadores de prensa no teníamos ninguna especificidad diferente al resto de los trabajadores del país que sufren la ofensiva contra sus condiciones de trabajo.


 


Las asambleas de Radio Nacional, Canal 7, Telefé Noticias, Clarín, Página 12, Perfil, Editorial Atlántida, Agencias Dyn y Noticias Argentinas, Infonews y Tiempo Argentino, y El Argentino Zona Norte, también votaron adherir a la medida de lucha convocada por las centrales obreras, la cual fue refrendada por el Sipreba, Atrana y la Fatpren.


 


La persecución política en el Estado abrió paso, durante 2016, a centenares de miles de despidos por parte de Cambiemos. El brutal ajuste—que en el gremio de prensa ya cuenta con más de 1.500 despidos y una paritaria que hundió nuestros salarios— no solo es exclusividad del macrismo: en Santa Cruz, la gobernadora Alicia Kirchner viene de ofrecerles un 3% de aumento a los docentes, lo que ha desatado una rebelión en la provincia. En prensa, fueron los kirchneristas Szpolski, Garfunkel y Cristóbal López los primeros abanderados del ajuste macrista.


 


Es la comprensión de no hay grieta a la hora de ajustar y reprimir la que permitirá construir una salida política a los trabajadores, independiente del Estado y las patronales.


 


Como agrupación nos pronunciamos sistemáticamente contra todo tipo de ataque al libre ejercicio del periodismo (el año pasado hemos repudiado el ataque a Wiñazki y a su equipo cuando elaboraban en La Plata un informe sobre la madre de Cristina Kirchner), como así también contra todo intento de preparar y aplicar un ajuste en regla contra los trabajadores.


 


Por eso nuestra total solidaridad con los compañeros de Télam.