Sindicales

6/7/2020

Subte: ante el acuerdo anti obrero de Larreta y la UTA

Debe convocarse el plenario de delegados

La Naranja del Subte

Hace ya 10 días que Metrovías, el gobierno de Larreta y la burocracia de la UTA firmaron un acuerdo, a espaldas de los trabajadores y de la AGTSyP – el gremio mayoritario –   por el cual un 40% del sueldo será no remunerativo. Se basan en el artículo 223 bis de la Ley de Contrato de Trabajo que habilita la reducción de los sueldos de trabajadores que, por razones ajenas al empleador o de fuerza mayor, trabajen menos horas que las acordadas por convenio. En este caso, la patronal argumenta que se está trabajado con horarios reducidos y que la recaudación ha caído sustancialmente. Argumentación falaz porque se trata de trabajadores de un servicio “esencial” adaptado a un horario de emergencia, ambas condiciones impuestas por decretos presidenciales. En segundo lugar porque se desconoce el perjuicio que sufre la concesionaria, ya que no se han abierto sus libros contables ni se ha investigado el destino de los millones ganados durante 26 años  por recaudaciones y subsidios del estado. Y aunque  lo hubiera, no corresponde cargar con la pérdida a quienes solo cuentan con su trabajo y su salario para su subsistencia y la de sus familias, comparado con la espalda de un holding multinacional  como el de Roggio. El acta incluye una ayuda por viático de 400 pesos por día físicamente trabajado, lo que constituye una discriminación contra los trabajadores exceptuados por decreto y los aislados por Covid – 19


Las sumas no remunerativas afectan centralmente a los aportes  jubilatorios, que son salario diferido de los trabajadores que retendrá la patronal y afectará más todavía a las arcas depredadas de la ANSES. Esta rebaja salarial disfrazada, se da exactamente en momentos en que debería tratarse la recomposición salarial, dado que la paritaria venció en febrero y existe una inflación prevista de no menos de un 43%. Se trata entonces de un ataque patronal a caballo de la pandemia, que debe ser rechazado activamente por la AGTSyP, incluyendo el método gremialmente desleal de haberlo firmado con el gremio minoritario y a espalda de la base y la AGTSyP.


La conducción del sindicato, luego de haber rechazado el acuerdo en los papeles, se ha  limitado a proponer una gestión legal aduciendo nulidad. Es decir: nada. Y rechazó en el plenario de delegados que trató el tema, la propuesta de los delegados y el ejecutivo de la Naranja del Subte y otros sectores, de desconocer el acuerdo, dar plazo para su retiro y poner en marcha un plan de lucha. En el debate, los argumentos de la mayoría – “no es el momento”; “el contexto de pandemia nos limita”; “la crisis económica se agrava” –  no se condicen con el rechazo que expresó la AGTSyP hace poco al pacto CGT – UIA (homologado por el gobierno), que justamente habilita las suspensiones y la reducción de los sueldos.


Las distintas  posiciones fueron giradas a los sectores para  ser debatidas y votadas. Varios han rechazado y propuesto un plan de lucha,  como Tráfico de la B, los Talleres Rancagua y San José e Instalaciones Fijas de la E.  Pasados 10 días, durante los cuales la Subsecretaría de Trabajo homologó el acuerdo, no se ha convocado el plenario de delegados que debe considerar los pasos a seguir ante este ataque a los trabajadores  y su representación genuina.  La demora juega a favor de la patronal y la UTA.