Sindicales

14/4/2020

Subte: el control sanitario debe estar en manos de los trabajadores

Metrovías y Larreta ponen en peligro a usuarios y trabajadores

La internación de un conductor de tráfico de la línea B por faringitis más fiebre motivó la abstención de tareas de los trabajadores de ese sector, hasta que el test para coronavirus confirme o no la presencia del Covid-19. La postura de la patronal fue que una vez aislado el trabajador y listados sus contactos, el servicio se brindara con conductores y guardas que no estuvieran entre ellos. Los delegados de tráfico en asamblea optaron por la abstención de todo el personal dada la falta de garantías de que las desinfecciones de las formaciones sean efectivas y completas. En un comunicado la AGTSyP (Asociación Gremial de Trabajadores del Subte y el Premetro) informó que la línea B no iniciaría el servicio del martes 14, mientras se espera el resultado del test del compañero internado. El hecho de que Metrovías y el gobierno de la Ciudad autoricen a que personal jerárquico mantenga el tráfico en la línea debe ser denunciado como una práctica peligrosa en términos de la seguridad sanitaria de los pasajeros. El subte puede ser una vía explosiva de contagios.


Esto pone en el tapete la cuestión central: quién diseña y controla la aplicación de los protocolos de seguridad sanitaria en los lugares de trabajo, los trabajadores en defensa de su salud y la de los pasajeros o las empresas que presionan por el levantamiento de la cuarentena privilegiando sus beneficios. Deben ser el Ejecutivo de la AGTSyP y el cuerpo de delegados, reunidos con los cuidados del caso, los que tomen en sus manos la organización de todo el operativo de lucha contra la pandemia mediante una comisión de seguridad e higiene con representación en todas las líneas que haga cumplir los criterios de seguridad.