Subte: la patronal no afloja

La empresa mantiene la sanción arbitraria contra un trabajador

Circulos del Subte Partido Obrero

Cumplidas 24 horas de paro de la Línea B del subte contra la sanción arbitraria a un trabajador, en una reunión mantenida el pasado viernes 29 pudo verificarse que la patronal se niega a dar marcha atrás: además de mantener la medida -20 días de suspensión por haber faltado de forma justificada para atender a su hijo discapacitado-, la empresa planteó que el trabajador sería trasladado a otra línea.

La parte obrera, que había suspendido transitoriamente la medida para concurrir a la reunión, se retiró reclamando una reunión de las partes con la cartera de Trabajo -que podría tener lugar el próximo martes o miércoles- para decidir a partir de allí la continuidad y modalidad del plan de acción.



Hay que destacar muy enfáticamente que la conducción kirchnerista de la Asociación Gremial de Trabajadores del Subterráneo y Premetro no sólo no ha convocado a un plenario de delegados, sino que ni siquiera publicó un comunicado sobre el conflicto. Y esto es grave, ya que en esta tozudez patronal de mantener una sanción arbitraria a un trabajador se oculta un fin más general: reinstaurar una política de sanciones y despidos en el subte como herramientas de la aplicación del plan de ajuste.



Dejar aislada a la Línea B es permitir el avance de esa política, que tiene innumerables antecedentes en juicios a delegados que luchan, pedidos de desafueros, sanciones a granel y la utilización del servicio médico como un recurso de persecución y disciplinamiento. Que la fracción K de la conducción deje correr todos estos atropellos es funcional al macrismo patronal. El aislamiento de la lucha de la B roza, además, la perversión, si se considera que sus delegados son de la oposición.



La Agrupación Naranja viene reclamando un plenario urgente de delegados para apoyar a la Línea B y trazar una agenda de lucha contra la ofensiva más general en el subte.