Subte: la sanción que dividió las aguas


La suspensión de 29 días y traslado de línea a la compañera Vanesa, es una sanción arbitraria porque se trató de una trabajadora que, discutiendo con una compañera, sufrió lesiones comprobadas. No puede separarse esta acción patronal de toda la política que, en particular desde el pase del subte a manos del macrismo, aplica sanciones a troche y moche y lleva a activistas y delegados a desfilar por tribunales como producto de protestas gremiales. En lugar de defender a la sancionada como parte del rechazo activo a la ofensiva macrista, la conducción kirchnerista de la AGTSyP, optó por hacer causa común con la empresa contra la compañera. Y con los mismos argumentos patronales -tiene antecedentes, es violenta, debe tratarse psicológicamente- sentó una postura anti clasista: la compañera es indefendible y debe agradecer que la patronal no la haya echado.


 


La trabajadora distribuyó una carta abierta y recorrió sectores reclamando el levantamiento de la sanción. La directiva de Pianelli y Segovia emitió un comunicado nefasto, fundamentando su actitud de pasividad ante el ataque patronal y recomendando a la compañera tratamiento médico. Ni una palabra sobre la patronal y su política. Política, debe señalarse, dirigida a quebrar toda resistencia a un plan de reconversión del subte destinado a eliminar personal y tercerizar trabajos propios.


 


La Agrupación Naranja (ATM e Independientes) se hizo cargo de la defensa de la compañera. Sus delegados -los únicos- la acompañaron y apoyaron. Un comunicado de la agrupación denunció el atropello patronal, lo vinculó con la ofensiva más general, llamó a la movilización del gremio y criticó a la directiva por su pasividad cómplice. Y sostuvo que la violencia en el subte la promueven la patronal y el macrismo, ante los cuales la defensa de cualquier trabajador es incondicional. Los delegados de la línea de Vanesa, por orientación de su conducción, desalentaron una medida de protesta que se venía discutiendo. La agrupación Bordó (PTS) - Violeta (Mastandrea - K disidente), que ocupa dos vocalías en la directiva, no fijó posición propia ante el hecho, ni como agrupación ni como minoría de la conducción. Coincidieron con el comunicado anticlasista de la conducción, revelando una fuerte adaptación a la directiva K. El haber roto el frente de izquierda en el subte para hacer un pacto con el desprendimiento pianelista, está llevando al PTS a trasgredir principios básicos del clasismo.