Los mecánicos del taller San José están resistiendo la intención de la patronal de que sean los trabajadores los que se hagan responsables de la desenergización de las formaciones sobre las que trabajan. Un protocolo aprobado hace tres años, entre la parte gremial y la patronal de ese taller, estableció el método de corte de energía, que está a cargo de los supervisores, con control final de los operarios afectados y que fue difundido como modelo recomendado a los demás talleres. 

Ahora la empresa pretende modificar ese protocolo, colocando la responsabilidad principal de la operación en los trabajadores. Todo esto en una materia como los accidentes por descargas eléctricas, que han costado la vida de 4 compañeros en pocos años y decenas de accidentes laborales en los talleres.

Los dos últimos de estos accidentes, con producción de lesiones graves, ocurrieron hace pocos días en los talleres Rancagua y Urquiza. Jefes de Metrovías, con escribanos, se hicieron presentes para constatar la resistencia de los trabajadores y anunciaron sanciones. Pero en una reunión de delegados de taller el 70% decidió acompañar la posición de San José.

Esta grave ofensiva empresaria contra la seguridad laboral, como el cuadro general, requieren una respuesta firme e inmediata de la AGTSyP, la organización representante de los trabajadores del subte. Esta respuesta no se ha dado, a pesar de las diversas luchas que vienen llevando a cabo distintos sectores de trabajadores de la empresa.

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