La Línea C realizó un paro de varias horas en solidaridad con Vanesa Herrera, contra su sanción y por su permanencia en su lugar de trabajo. La compañera, que pertenece a Tráfico de esa línea, recibió 29 días de suspensión y traslado de línea, a causa de una reyerta particular, de la que salió lesionada.

La conducción pianelista no sólo no enfrentó la sanción arbitraria y punitiva, sino que sacó un comunicado y saturó las redes sociales atacando a la trabajadora con argumentos de la patronal, por su “historial de agresiones”, recomendándole tratamiento psiquiátrico y sin una sola mención a la fuerte ofensiva represiva del macrismo en el subte.

La Agrupación Naranja (ATM e Independientes) defendió desde un inicio públicamente a la trabajadora, sus delegados se pusieron a su disposición e insistió con su reclamo de una movilización del sindicato contra la fuerte persecución macrista contra los luchadores del subte.

Si bien habrían sido delegados de la UTA quienes tomaron la iniciativa, la medida de paro contó con la adhesión de la mayoría de Tráfico incluyendo a los afiliados a la AGTSyP, desmintiendo la versión de la conducción, que decía que la compañera no contaba con el apoyo de sus compañeros.

También trascendió que hubo una reunión con la empresa y una medida cautelar de la Justicia, resultado de lo cual la compañera debe tomar servicio en su Línea C. Conclusión elemental, el abandono de la compañera por parte de la Directiva abrió un flanco para la intervención de la burocracia de la UTA y se la dejó picando, para aparecer “por izquierda” como la defensora de los trabajadores.

No sólo eso, la política nefasta de la conducción dejó pagando a los propios delegados de la AGTSyP de la Línea C que se opusieron al paro. Vanesa ha declarado que no se afilió a la UTA. Así y todo los twiteros y blogueros pianelistas siguieron obstinados pegándole a Vanesa y acusando a ATM y la Naranja de ser los enemigos de la AGTSyP.

Se están tomando el veneno que ellos mismos destilaron. El resto de las decenas de sancionados y judicializados del subte siguen esperado una reacción de la Directiva contra la represión.

Una mención especial para el frente Bordó (PTS) – Violeta (K disidentes) que cerraron filas con la conducción y su comunicado, evitando, ahora nuevamente, pronunciarse en defensa de la trabajadora, ni como agrupación ni como minoría de la directiva que integran.