La patronal de Toyota decidió eliminar un turno hasta “que aclare el panorama”. Pero lo hace mediante una modalidad novedosa que le ha valido aplausos del ministro de Trabajo Erman González, “impulsor de la idea” (La Nación, 21/1).

El titular de Relaciones Industriales, R. Gatica, explicó que “producirán el 50%”, pero haciendo uso de “una cláusula del convenio firmado con Smata, que les permite incluso cerrar temporariamente la fábrica, pagando sueldos que se transforman en créditos de horas, para cuando haya una reactivación”. Dijo más adelante, “Toyota de Zárate no estará produciendo, las horas serán un crédito para cuando las necesitemos”.

Ni más ni menos que el banco de horas que intenta enchufarles la patronal de Renault a los compañeros cordobeses.

En verdad, estamos asistiendo a un nivel de colaboracionismo de la burocracia que no soñaban las patronales. Los convenios Smata han llevado el salario a 2 pesos la hora lo que equivale a decir el 30% del valor básico de una canasta familiar de emergencia, perforando todo piso en el valor de la fuerza de trabajo. Los ritmos y las multifunciones han elevado de manera brutal e inhumana la explotación del trabajo.

¡Fuera los convenios negreros del Smata!

¡Reclamamos el desconocimiento de todo crédito de los mecánicos de Toyota que no son responsables de esta crisis!