Sindicales

6/5/2004|849

Tandil, Buenos Aires: El acto en Inpopar

Con una concurrencia de 60 personas, el acto del 1° de Mayo se realizó en la fábrica Inpopar, una cooperativa que fue recuperada por sus propios trabajadores, expropiada por la Legislatura (sólo falta la firma del gobernador).


Que el acto se realizara en una fábrica recuperada tiene una importante significación política, la cual fue puesta de relieve por los oradores de la cooperativa, de la Agrupación Agustín Tosco y del Partido Obrero: Inpopar, como tantas otras fábricas que han quebrado, es la muestra cabal de la descomposición social del régimen capitalista y también de la manera como la clase obrera enfrenta esta política que nos hunde en la pauperización, y muestra un rumbo inequívoco: el gobierno de los trabajadores.


Pese a lo logrado, la cooperativa sufre todas las inclemencias que le impone un mercado copado por los grandes grupos monopólicos; de hecho, actualmente su producción es destinada a la norteamericana Carrier, a través de un contrato de tercerización, cuyo “intermediario” es el ex dueño de la fábrica, Uzandizaga. Un tipo que endeudó y mando a la quiebra a su fábrica mientras compraba olivares en la provincia de Catamarca que le reportan jugosas ganancias. Además, vuelve a explotar a sus obreros con un contrato que triangula a Carrier con Armagas (empresa fantasma de Uzandizaga) e Inpopar. Hoy los compañeros trabajan doce horas para poder darle de comer a sus familias.


El Partido Obrero reclama:


• Inmediata expropiación y cesión definitiva de la fábrica a la cooperativa.


• Subsidio para capital de trabajo de 140 mil pesos.


• Que el Estado declare a Inpopar proveedor privilegiado.