Sindicales

6/1/2000|652

Tartagal: Se levantó el corte de ruta

Como balance de la lucha hay que decir que fueron incesantes las maniobras orientadas a producir el levantamiento del corte de la Ruta Nacional 34 a la altura de General Mosconi, donde se congregaron los miles de desocupados, jóvenes y mujeres de todo el Departamento San Martín para protestar en reclamo de trabajo. Entre los más destacados impulsores del levantamiento encontramos a la dirigencia de ATE en sus tres niveles, local, provincial y nacional. Esto obedece a que ATE, a través de su máximo dirigente, Víctor De Gennaro, impulsó la formación de la Alianza transformando a la CTA (Central de Trabajadores Argentinos) en el brazo gremial del gobierno. No es casual que haya dicho que el paro convocado por la situación de Corrientes no era un paro contra De la Rúa, sino por la vida, cuando sabe que nuestro flamante presidente ordenó a través del Freddy Storani la represión que causó 5 muertos.


Destacamos el papel de ATE porque en el caso de Tartagal ni siquiera resolvió realizar un paro en contra de los 162 despidos; sólo se limitó a convocar a golpear los bombos y a instalar una olla frente al municipio, y en 33 días no consiguió nada. Incluso en los picos de movilización popular, de más de 5.000 personas, fueron desoídos los reclamos de extender el conflicto a todo el Departamento San Martín, sumada la negativa a la iniciativa de cortar la ruta mocionada en una asamblea por compañeros cesanteados. Esta política de desgaste fue quebrada por la acción de los activistas y luchadores, particularmente del PO y de los desocupados de Mosconi, que impulsamos la utilización del método de las Asambleas Populares. Contra todos los pronósticos, contra todas las maniobras, contra las limitaciones organizativas los trabajadores pudimos mostrar cuál era el camino a seguir.


Aunque hay quienes creen que no se consiguió demasiado, el plan de Romero, el gobernador peronista de Salta, de dejar sin trabajo a 3500 municipales en toda la provincia recibió un duro golpe. Se le impuso al gobierno nacional que mantenga los 1.963 ‘Planes Trabajar’ y 3.000 nuevos puestos para los desocupados. Los funcionarios nacionales se ‘comprometieron’, asimismo, a apoyar las Pymes que han formado los desocupados de YPF y ‘gestionar’ ante las petroleras la reducción de la jornada de 12 a 8 horas, para que haya más trabajo.


La lucha por el mantenimiento de los 2.653 puestos de los Planes Provinciales ya deja entrever que habrá más lucha, pues los compañeros que ocuparon la Municipalidad y la Unidad de Empleo solamente arrancaron una prorroga de un mes, hasta el 31 de enero, el tiempo que se tomarán los compañeros para recuperar el Sitrap (Sindicato de Trabajadores de los Planes) y, a partir de allí, establecer un plan de lucha y la huelga general de todos los trabajadores para que estos puestos se prorroguen por dos años.


La desconfianza de los sectores más combativos de los desocupados es tal que ya están elaborando planes para profundizar la lucha, con sus métodos: cortarles los accesos a los yacimientos.


La tarea planteada ahora es lograr que todos los sectores, la juventud, las mujeres, los desocupados, los “del Plan” y todos los que permanentemente enfrentamos las políticas antiobreras, podamos consolidar un Polo Clasista y combativo para desarrollar una lucha de conjunto. La lucha continúa.