Sindicales

11/2/2015|1350

TECNICOS AERONAUTICOS: No a las suspensiones ni a la flexibilización laboral

El activismo actúa ante una dirección en crisis


El Ministerio de Trabajo dictó la conciliación obligatoria ante el solo anuncio de un paro de 24 horas de la Asociación del Personal Técnico Aeronáutico (Apta) para el 9 de febrero, en rechazo a sanciones implementadas contra cinco trabajadores, en el marco de un conflicto laboral en Córdoba.


La suspensión de los compañeros de Austral en Córdoba es parte de una ofensiva de la dirección de la empresa contra las condiciones laborales de los técnicos y, a su vez, la resultante de un acta flexibilizadora firmada por la propia dirección del gremio que no fue aprobada ni discutida en ninguna asamblea y que los mecánicos rechazan; le exigieron que la desconozca a la dirección de Apta y que se tomen medidas de acción.


La ofensiva negrera de Recalde tiene varios frentes: obliga a los sectores operativos a fraccionar sus vacaciones en múltiplo de diez, diferenciándolos del resto de la compañía, que lo puede hacer en siete días; no respeta el Convenio Colectivo de Trabajo; hay persecuciones a los activistas; hay una total falta de inversión en los sectores de Oficinas y Mantenimiento, donde siguen incumpliéndose normas de seguridad e higiene.


La enorme pasividad de la dirección del gremio llevó a que varios delegados firmaran un petitorio reclamándole acción frente a todas estas provocaciones patronales, pues la dirección de Apta ni siquiera fue capaz de defender a los compañeros despedidos del hangar de Aerolíneas Argentinas.


La conciliación obligatoria (rápidamente aceptada por la dirección de Apta) ya era “vox populi” antes de que se realizara ninguna medida, por eso los delegados reclamaban intervenir y resolver en qué condiciones acatarla o no, pero la dirección del gremio no consultó a nadie para acatarla.


La conciliación deja pendiente el inmediato levantamiento de las suspensiones de los técnicos, que se les pague los días caídos y que se anule esa acta que el propio gremio firmó. Si esto no ocurre, se replantea que se convoque un paro de 24 horas de repudio, en rechazo a la ofensiva patronal y la convocatoria de una asamblea general por el resto de las reivindicaciones.


Hace ya mucho tiempo que se ha agotado la dirección de Cirielli; su política está haciendo perder conquistas históricas de los técnicos. Es necesario superarla y que esto se exprese en una lista elegida en asamblea entre todos los delegados para que en las próximas elecciones haya una verdadera dirección de lucha de los técnicos.