Sindicales
12/8/2004|863
Terrabusi, pequeña sublevación
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En Terrabusi, el repudio a la burocracia se palpa en el aire; hace un par de meses Daer entró a la planta y fue echado a pedradas por los trabajadores al grito de chorro, corrupto y ladrón.
Un delegado muy ligado a la Comisión Interna y la Lista Celeste y Blanca acepto un “ofrecimiento” de Jiménez y se pasó a la Lista Azul. El argumento de este pichón de traidor fue que “yo me debo a la gente, no me interesa la política”. Parece que la gente no piensa lo mismo, ya que gritándole forro, buchón y traidor no lo dejaban ingresar a los distintos sectores.
Datos de una realidad que está recorriendo al gremio.