La manifestación realizada por trabajadores tercerizados de Aerolíneas Argentinas de la empresa GPS y por trabajadores químicos de Megaflex (Burzaco) puso de manifiesto los reclamos que vienen impulsando con un corte en Callao y Corrientes (CABA).

Los 16 despidos en Megaflex en noviembre del año pasado tuvieron una gran reacción en la planta con un paro total que duró dos semanas. La intervención de Ministerio de Trabajo y la parálisis del sindicato fueron funcionales para que la empresa juegue al desgaste de esta lucha por los puestos de trabajo. Los compañeros realizaron bloqueos de portones hace unas semanas, y siguen en pie de lucha por la reincorporación de todos los despedidos.

La avanzada patronal tiene de fondo el intento de imponer el aumento de la productividad con menos trabajadores en planta y aumentando los ritmos de producción. Está planteado desenvolver una lucha por la reincorporación en unidad con los reclamos de los trabajadores de adentro de planta.

Por su parte, los trabajadores de GPS reclamaron la reapertura de paritarias, así como también denunciaron el intento de fraude en las elecciones de delegados de cada turno. Allí expresaron que una maniobra de la burocracia sindical del gremio Upadep no permite que cada trabajador pueda votar la cantidad de delegados a ser elegidos. Esto se produce luego del intento de expulsar a los delegados, así como de postergar la convocatoria a elecciones.

Los trabajadores siguen organizados y en lucha por sus reclamos, con el acompañamiento de organizaciones sindicales como la Coordinadora Sindical Clasista y distintos sectores.