El 29 de junio los trabajadores de prensa de Córdoba realizaron una contundente protesta frente a la sede del diario La Voz del Interior. Fue en el marco de la lucha que vienen llevando adelante los trabajadores de prensa de Córdoba por un salario de 2.200 pesos de básico, con paros de dos horas por turnos y asambleas en los distintos medios.

La agencia cordobesa del Ministerio de Trabajo de la Nación dictó la conciliación obligatoria. Norberto Ciaravino, un ex-funcionario de La Voz del Interior, es hoy funcionario en el Ministerio de Trabajo de la Nación.

La Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas (Adepa) denunció la protesta frente a La Voz como una “grosera agresión a la libertad de prensa”; al mismo tiempo, la Justicia penal de Córdoba imputó a cuatro de los compañeros manifestantes por “flagrante violación al artículo 161 del Código Penal, que establece que sufrirá prisión de uno a seis meses el que impidiere o estorbare la libre circulación de un libro o un periódico”.

A la última reunión paritaria las empresas acudieron, una vez más, con las manos vacías. Pretenden obligar a los trabajadores de prensa a discutir la paritaria sin poder realizar huelgas o manifestaciones (en nombre de la “defensa de la libertad de prensa”).

Los trabajadores han ratificado el cronograma de asambleas previstas en los medios gráficos, radiales y televisivos en toda la provincia por el aumento salarial, repudiaron la criminalización de la protesta, denunciaron la connivencia del Estado (provincial y nacional) con las empresas, y reclamaron al Cispren (Círculo Sindical de la Prensa y las Comunicaciones de Córdoba) que convoque un paro para el próximo 18 de julio.