Sindicales

28/2/2008|1027

Triunfo en Arcor

Ahora, prepararse para la paritaria


Los trabajadores de Arcor han obtenido un triunfo en su lucha por un adicional ("doble aguinaldo") en compensación por la inflación de 2007: una suma extraordinaria de  1.200 pesos, pagadera en dos cuotas iguales, en febrero y marzo. El acuerdo rige para todas las plantas que la empresa cordobesa tiene en siete provincias del país, con casi 20.000 trabajadores.

El triunfo es el resultado de casi un mes y medio de lucha que combinó un reclamo de la Federación de Trabajadores de la Alimentación (hacia el conjunto de las empresas de la alimentación) y una negociación particular con la empresa Arcor (la principal del sector). El gobierno nacional, y también el cordobés, se apuraron a declarar la conciliación obligatoria en el conflicto, para llegar a la paritaria (el convenio actual vence el 30 de abril) con un plus de 150 pesos mensuales; el gremio reclamaba 450 pesos mensuales.

Las jornadas de lucha, que consistieron en asambleas de dos horas por turno, cortes de ruta frente a la planta y movilizaciones a la casa central de grupo en la ciudad de Córdoba, fueron "las protestas más crudas en sus 58 años de historia (de la empresa): bloqueos a plantas y centros de distribución de Córdoba y Buenos Aires fueron solucionados antes de que se percibiera escasez en los supermercados" (La Nación, 15/2).

El reclamo salarial ya había sido planteado en octubre por los trabajadores de la planta de Bagley-Arcor (ex Lía) lo que llevó a la patronal a despedir a 170 trabajadores. Una toma de fábrica muy combativa obligó a la empresa a reincorporar a los despedidos, pero sin resolver el reclamo salarial. Tres meses después la lucha adquirió un carácter generalizado.

El triunfo de los trabajadores de Arcor es estratégico para la negociación paritaria que comienza. Así lo entendieron la patronal y los gobiernos. "Con 1.200 pesos, la empresa ya arranca las negociaciones paritarias con un 22% de incremento salarial del básico. Son pedidos totalmente irracionales', aseguró, furioso, un empresario allegado a Arcor, que sigue con preocupación el tema porque será considerado como un caso testigo en el resto de la industria alimenticia, que cerró en cifras mucho menores" (El Cronista, 22/2). La información refleja el estado de ánimo de los empresarios, pero las cifras no son exactas. Un delegado de Arcor en Salto lo explica así: "el sueldo básico es bajo, 1270 pesos con ocho horas de trabajo… se gana un sueldo razonable haciendo muchas horas extras, trabajando sábados y domingos. El reclamo viene desde hace tiempo, el pedido concreto es para los meses enero a abril una suma fija, y después en abril cuando se abra el convenio hablar de sueldos, tarifas de horas y demás".

En octubre los trabajadores de la ex Lía explicaban su reclamo con una claridad meridiana: "Arcor se beneficia con la inflación y con la devaluación, nosotros no recibimos nada de eso". Arcor es la principal productora de alimentos del país; tiene 28 plantas elaboradoras en Argentina y siete entre Chile, Brasil y Perú, además de doce oficinas comerciales fuera del país.

Ahora viene la discusión paritaria; los trabajadores parten con un triunfo que las patronales querrán birlar. Las medidas que pueden fortalecer este triunfo parten de mantener la movilización del gremio con la realización de asambleas para votar un programa (incorporación del plus al básico; un mínimo igual a la canasta familiar) con todas las reivindicaciones pendientes, y elegir los delegados paritarios.

Es la oportunidad de Terrabussi, de Pepsico y de todo el gremio de la alimentación, a condición de actuar sin depender de la burocracia sindical, ni de Morán ni de Daer, a partir de las asambleas obreras.