Sindicales

1/7/2004|857

Uatre: La burocracia, alcahueta de la patronal

Hay una ecuación que funciona contra los trabajadores del citrus: patrones + burocracia = sometimiento y despido.


Sometidos


En las quintas, el año pasado los trabajadores tenían que llevar a toda su familia a cosechar para ganar un peso. Ahora ni eso alcanza; tienen que sumar también al vecino, puesto que ganan el mismo sueldo que el año pasado, o sea 0,54 centavos por maleta, más los descuentos nacionales. En el mejor de los casos, un cosechador gana 400 pesos por mes. Más sometidos aún están los compañeros de empresas como Longo, obligados a trabajar en negro, sin beneficios sociales, condenados a tener obligaciones y ningún derecho.


¿Qué hacen ante todo esto nuestros dirigentes sindicales? Nada. ¿Cómo nos van a defender si ellos son parte de la patronal, como ocurre en la seccional 598 de Villa Carmela, donde el secretario general de la seccional es capataz de una finca de Pablo Padilla?.


Despidos


En febrero y marzo, compañeros que pertenecían a la Agrupación 4 de Octubre, que enfrentó a la burocracia en la elecciones, recibieron telegramas de despidos de las empresas San Miguel y Citrusvil. Así, cinco compañeros con antigüedad de 8 a 16 años de servicio fueron despedidos. El único argumento fue que eran un peligro para el sindicato, pues “se habían puesto en la vereda de enfrente”.


Pero los despidos no los están sufriendo sólo los luchadores. Hace unos días, la empresa de Pablo Padilla despidió a 50 trabajadores. Otro tanto ha pasado en otras empacadoras. Es un método para mantener aterrorizada a la gente.


Frente a todo esto está en curso un proceso lento pero consistente de organización de base que, llegado el momento, va a asomar con fuerza y barrerá a la burocracia para colocar a nuestras organizaciones al servicio de nuestros reclamos.