Sindicales

10/10/1996|514

Un ‘convenio’ de despidos y ‘tercerización’

El convenio ‘pre-acordado’ por la burocracia de Rogelio Rodríguez con Telefónica y Telecom, tiene, aparte de todas las cláusula ‘flexibilizadoras’ imaginables, en materia de jornada laboral, vacaciones, pro­ductividad, polifunción etc. (ver artí­culo parte), interesantes conquistas para la patronal.


El ‘nuevo convenio’ eliminaría todo derecho de carácter colectivo, adquirido previamente por otros con­venios, resoluciones o disposiciones de carácter estatal o autónomo (art. 2). Todo un capítulo, “condiciones especiales de egreso” (anexo 4), está dedicado a institucionalizar los despidos sin causa, disfrazados como “retiros voluntarios”, principal motivo de las luchas de los telefónicos bajo las privadas los últimos años.


Establece el cese del personal próximo a jubilarse, mediante una indemnización (4 salarios básicos hasta 28 años de antigüedad) y pago de 40% del básico hasta la jubilación, sin actualización (jubilación anticipada; Y un sistema llamado de “re­conversión laboral”, mediante el cual se pagaría un 50% del básico por un año, mientras el despedido es ‘ca­pacitado’ por FOETRA y entra en la bolsa de trabajo del sindicato. Es decir empalma con los ‘microemprendimientos’ o trabajo contrata­do, a cargo del sindicato, para tareas concesionadas por las empresas. La burocracia interviene como socio me­nor de la patronal en la ‘limpieza’ de personal telefónico.


Otro capítulo, de “cesión de personal” (anexo 2), autoriza la ce­sión de los contratos de personal bajo convenio, a otras empresas, contro­ladas por Telecom y Telefónica, de diversos rubros. Abriendo la posibili­dad de tercerización de la mayoría del personal actualmente en las em­presas y el principio de disolución de la unidad gremial y del propio sindi­cato.


Sólo un carnero nacional (firmó la solicitada contra el paro del 26/27 y organizó un congreso de FOETRA los días de paro), a sueldo de las empresas telefónicas, puede haber firmado semejante engendro. Ahora se las va a tener que ver con los trabajadores telefónicos, que vienen en un proceso creciente de moviliza­ción. Y que en la concentración del 26 participaron con una columna de más de 1000 compañeros bajo la ban­dera del plenario antiburocrático del Sindicato Buenos Aires.