Una campaña que recoge el apoyo y la simpatía de los telefónicos

El 18 de mayo, todos con la Granate-Blanca


Las elecciones de Foetra pusieron sobre la mesa el agotamiento político de la actual conducción azul y blanca. El 18 de mayo se vota y la Granate-Blanca tiene grandes posibilidades de recuperar el sindicato. Pablo Eibuszyc, del PO, es candidato a secretario adjunto por la Naranja Telefónica en esta lista, que se formó para recuperar el sindicato para los trabajadores.


 


Hay un clima que se palpita sólo caminando el gremio. En las asambleas, charlas y reuniones, que organizamos para presentar a nuestros candidatos y los planteos para esta elección, surgen de compañeros de los distintos sectores, un sinnúmero de reclamos pendientes y abandonados por la conducción.


 


Son los telefónicos los que denuncian en cada oportunidad a la Azul y Blanca por haberse alejado hace años, y cada vez más, de la base, renunciando a dar una lucha consecuente para recomponer el salario o por el cobro de los bonos de participación de las ganancias. Porque no pelean por un verdadero plan de carrera con una re-categorización general y porque no defienden el convenio colectivo.


 


Desde la Naranja Telefónica explicamos en cada oportunidad, que esto es el resultado de los compromisos con las patronales y su integración a la política de telecomunicaciones, tanto a la del gobierno anterior como ahora a la de Macri. Que para hacer pasar las paritarias a la baja y en cuotas todos estos años dejaron de convocar a asambleas de edificios y generales, llegando a apelar al fraude para lograr su cometido.


 


Esta conducción presentó como un paso adelante el encuadramiento de las móviles (con un convenio a la baja y con 9 horas). Pero en estos cuatro años que pasaron no dieron un solo combate por la equiparación de los convenios fija-móvil. Fue al revés, sirvió para dejar a las empresas meter las 9 horas en la fija. Equipararon, pero a la baja. Transformaron lo que podría haber sido un progreso en la lucha contra la precarización, en el asiento de la flexibilización laboral del convenio de Foetra.


 


 


Defendamos la democracia sindical


 


Es justamente este clima lo que preocupa a la burocracia sindical y a las patronales de Telefónica y Telecom (o sea, Clarín). Esta preocupación común, de que la izquierda recupere el sindicato, los puso a trabajar en equipo.


Telecom impide el ingreso de los candidatos de la Granate-Blanca en sus empresas para hacer campaña, atropellando así una tradición democrática de nuestro gremio. 


 


Denunciamos en la Junta Electoral (dominada por la AyB) esta situación, reclamando que se adopten la medidas gremiales para garantizar este derecho. Pero ni la Junta ni la conducción se han siquiera pronunciado. Por lo bajo responden que a ellos tampoco los dejan entrar. Por supuesto, es una mentira. Se trata de una proscripción para nuestra campaña. Pero el tiro les está saliendo por la culata.


 


La solidaridad y la indignación se extiende por donde vamos. Al retroceso salarial, el deterioro del convenio, falta de recategorizaciones, el abandono de la lucha por los bonos y el ataque a la estabilidad laboral (despidos en Nextel y fuera de convenio Telecom), se le suma ahora la entrega de la libertad gremial en el interior de las empresas. 


 


 


Recuperar Foetra para enfrentar el ajuste


 


La convergencia financiera y “tecnológica” impulsada sobre las telecomunicaciones, apoyada en el capital financiero, colocó a los telefónicos frente a un gran desafío. El proceso de fusión de las empresas como llevó adelante Clarín, comprando a través de Cablevisión a Telecom y Nextel, puso sobre el tapete la política de “racionalización” de Macri, que empezó el año pasado con 120 despidos en Nextel y que continuó con centenares de compañeros fuera de convenio de Telecom, y ahora con “los retiros voluntarios” que no son otra cosa que despidos encubiertos. Tienen en carpeta mil en Telefónica y mil en Telecom.


 


La reestructuración es el ataque a nuestras condiciones de trabajo y la precarización laboral. La tercerización sigue avanzando y será un apoyo para esta política. El ajuste buscará en esta etapa avanzar con los retiros “voluntarios” y los despidos a cuenta gotas de trabajadores fuera de convenio, tratando de meter modificaciones a la baja en el CCT. Para la burocracia que dirige hoy Foetra y para las patronales será una tarea estratégica debilitar al máximo nuestra organización gremial, nuestra capacidad de reacción y de lucha, y cercenar a fondo la libertad sindical que con tanta lucha conquistamos.


 


Necesitamos poner de pie al gremio, para defendernos y enfrentar el ajuste.


 


Fuera la burocracia sindical. Por un Foetra de los trabajadores. Abajo el ajuste de Macri, las telefónicas y Clarín.


 


Este 18 de mayo votá a la Granate-Blanca.