Sindicales

26/4/1989|266

UOCRA Neuquén: ¡Ningún compromiso con la burocracia! ¡Elecciones en todas las obras YA!

Más de 500 trabajadores de la construcción de Neuquén concurrieron el sábado pasado a la asamblea general en la asumió la nueva directiva antiburocrática. El acto se realizó ante escribano público porque los burócratas, tanto Farías como Selesky, se negaron a entregar formalmente el sindicato. Los jerarcas, que fueron aplastados en la votación más masiva y transparente de la historia de la UOCRA Neuquén, han presentado una impugnación ante la justicia en la que argumentan que los comicios fueron "minoritarios” y viciados de "irregularidades”. La burocracia recurre al Ministerio de Trabajo y a la justicia para mantenerse en los sillones luego de haber traicionado todas las luchas de los últimos años, destruido la obra social y tolerado la peor desocupación y caída del salario.

Farías y Selesky tienen el apoyo de la Unión Argentina de la Construcción y de la Cámara Argentina de la Construcción que reúnen a las patronales más poderosas del país (Techint, Castellone, Sade).

En relación con esta situación la asamblea de asunción de la Directiva Naranja-Violeta dejó grandes lagunas. La nueva dirección no trazó allí ninguna línea de organización y lucha y hasta invitó a presidir el acto a los representantes de las listas burocráticas derrotadas.

Esta conducta frente a los burócratas encierra un enorme peligro. Ocurre que prácticamente todos los que han encabezado las listas burocráticas fueron barridos por los votos de la lista de izquierda en sus propias obras, en las que son delegados o miembros de interna. Es decir han sido repudiados por la base de sus lugares de trabajo, de manera que la tarea de la hora es iniciar una ofensiva que expulse a todos los agentes de la destrucción del sindicato en las obras para que se elijan nuevos delegados. Esta es una tarea preparatoria fundamental para una movilización victoriosa por el salario y la obra social.

La presencia de 500 compañeros en la UOCRA Neuquén no se registraba desde hacía tiempo y ello indica que se acentúa la recomposición en las filas obreras que comenzó a registrarse desde antes de la elección. La consolidación de esta tendencia exige una seria orientación política que permita que la vanguardia del gremio tome la dirección en todas las obras.

Neuquén es un polvorín

En el movimiento barrial y entre los estudiantes secundarios de Neuquén se está expresando ya la creciente bronca popular contra la insoportable carestía. El viernes 14 hubo una movilización de 1.000 estudiantes por el boleto estudiantil y el miércoles 19 se realizó una manifestación de 300 vecinos contra los “tarifazos” y la miseria.

La convocatoria vecinal surgió de activistas del barrio Bouquet Roldán, que reunieron a los partidos, a la CGT y a comisiones de otros barrios para organizar la protesta. Los diputados de la UCR y del sapagismo trataron de desalentar la marcha argumentando que era “inútil" o que se “producirían" explosiones como en Venezuela. Los vecinos rebatieron los argumentos, conformaron una “Interbarrial" y votaron movilizarse contra los “tarifazos” y un salario mínimo de 16.000 australes. Los jerarcas de la CGT que habían ido para “ponerse a disposición de la gente" se borraron y el MPN comenzó una labor desorganizadora tendiente a encuadrar el movimiento bajo el comando de un fantasmal “Consejo Vecinal Asesor" que maneja el gobierno. De la desorganización pasaron luego al sabotaje abierto y al macartismo. Se retiraron de la marcha y la sustituyeron por “entrevistas con el gobierno" y “acciones conjuntas con la Cámara de Comercio" para verificar precios y comenzaron a denunciar al PO por hacer “partidismo" como si fuese un descrédito y no un motivo de orgullo la actividad práctica de nuestro partido a favor de las reivindicaciones populares.

A pesar de esta campaña y a partir de los barrios donde realmente se realizaron asambleas (Islas Malvinas, Cordón Colón, Don Bosco II) la marcha se llevó a cabo con más de 300 manifestantes.

La interbarrial ahora está abocada a la preparación de una segunda marcha.