El nuevo pacto paritario entre Milei y UPCN de un irrisorio 3,02%, dividido en cuotas de 2% para septiembre y 1% en octubre, está causando una conmoción política entre los estatales pero también en la opinión pública. Es que la relevancia de este nuevo robo a los estatales excede largamente su “ámbito de aplicación”. Por intermedio de Andrés Rodríguez, la CGT está inaugurando su apoyo a la política oficial de techos salariales de 2% anunciadas hace días por Mieli y Caputo. 

Ni bien se conoció el resultado, el shock se esparció como reguero de pólvora. No solo por los porcentajes cercanos a 0% sino por los salarios sobre los que se aplicarán, que se encuentran en niveles de indigencia tras ser reducido cerca de un 27% en términos reales contra una inflación 263,4% durante el último año. 

Los números son escalofriantes: en septiembre, la categoría inicial del convenio mayoritario entre los estatales nacionales (Sinep) quedará en $326.400 de bolsillo, lo que representa un “aumento” de $337 por día. La categoría testigo quedará en $483.908, o sea, cobrará $500 “más” por día. La categoría tope de convenio, incluso si cobra titulo universitario (un adicional de 20% para contratados y 40% para la planta), ya hoy no supera la canasta familiar de $1.421.647 que mide ATE Indec al 31/07. 

El rescate político de UPCN hacia Milei es por partida doble. Tras firmar un mísero 6,6% hace 2 meses, vuelve a insertar la paritaria estatal en el operativo gubernamental de exhibir un supuesto sendero decreciente de la inflación, obtenido temporalmente a base de una brutal recesión económica. A su vez, mediante un nuevo golpe en el Estado facilitado por Andrés Rodríguez, Milei busca los recursos políticos en la población para legitimar el veto a la ley que otorga un mísero 8% de recomposición a los jubilados y hacer pasar los nuevos tarifazos en servicios, naftas y transporte que pulverizarán el poder adquisitivo por cuenta y orden del FMI.

La “escribanía” de UPCN y el nuevo “rechazo” de ATE

Este salto de calidad en la destrucción del salario estatal se desenvuelve en un marco de fuerte extorsión sobre los trabajadores. Con la Ley Bases, Sturzenegger amenaza con acrecentar los más de 20.000 despidos ya ejecutados desde enero a base de ‘baja de contratos’, al tiempo que prepara el desmantelamiento de la planta permanente con miras a avanzar en el desguace y privatización de organismos y empresas públicas. 

Ante semejante ofensiva, la colaboración de las conducciones de los sindicatos, por acción o desorganización, es inusitada. Andrés Rodríguez entregó nuevamente a los estatales al colaborar con Milei en redacción de la Ley Bases, que instaura una reforma laboral completamente antiobrera y elimina la estabilidad laboral en el Estado. Aunque no sorprende, UPCN ha oficiado de escribanía para hacer pasar ajuste tras ajustes de todos los gobiernos.

La responsabilidad de ATE nacional es movilizar a los trabajadores y organizar un reclamo salarial desde una posición de fuerza. Sin embargo, nada de esto ocurre. ATE nuevamente firma un rechazo vacío de contenido, sin preparación alguna y en la completa desmovilización. En las provincias, la Verde firma acuerdos a la baja con los gobernadores que aplican la motosierra de Milei. En Anses y Acumar, sin mandato alguno, viene firmándole a Milei, Caputo y Pettovelo paritarias inferiores a las que “rechaza” a nivel central. También sin consultar a nadie, pactó junto a Milei y UPCN la continuidad del infame descuento de 0.5% sobre los no afiliados, el premio que Alberto Fernández y Cristina habían otorgado a los sindicatos a cambio de entregar el reclamo del pase a planta y firmar rebajas salariales a espaldas de los trabajadores, es decir, por actuar sin mandato.

Por su parte, el comunicado de rechazo que firmó Catalano de la Verde y Blanca de ATE Capital no se aparta de la esterilidad general de ATE, ya que carece de iniciativa o medida de lucha para desenvolver una denuncia de tipo práctica contra este ruinoso acuerdo. El límite de Catalano no es organizativo sino político: mientras denuncia el ajuste de Milei, acaba de firmarle una paritaria a Jorge Macri de 4% en agosto, 3% septiembre y 3% octubre. El kirchnerismo está jugado a garantizar la gobernabilidad con todo tipo de compromisos y acuerdos con el propio triángulo de hierro Caputo-Milei-Karina M.

Asamblea nacional, paro y plan de lucha por salario y contra los despidos

Los estatales tenemos la fuerza para enfrentar la ofensiva oficial. Nuestros compañeros del Hospital Garrahan nos marcan un rumbo yendo al paro este miércoles 4/9 por un salario inicial de $1.400.000, por aumento de 100% en una cuota y contra el Impuesto a las Ganancias, lucha que debe ser apoyada por ATE con todo.

Debemos apoyarnos asimismo en las luchas obreras que comienzan a reavivarse en respuesta al agravamiento de las condiciones de vida. Los docentes que enfrentan la motosierra de los gobernadores en el todo país y se organizan contra la “esencialidad” que lesiona el derecho huelga; los docentes y trabajadores de la Universidad en lucha contra el vaciamiento presupuestario y por salario; y la pelea que vienen trabajadores del neumático y su sindicato (Sutna) contra los despidos truchos en todo el país, demuestran que existen reservas de lucha entre el movimiento obrero.

Los trabajadores no podemos pagar una crisis que no generamos. Superemos la parálisis y la entrega que nos imponen las conducciones burocráticas de ATE y UPCN. Reclamemos gran asamblea nacional de estatales, sin distinción de afiliación, que unifique todas las peleas en el Estado y para votar un plan de lucha contra los despidos contra el desguace y por salario.

Más que un comunicado vergonzante, la CGT tiene que lanzar un paro general por las jubilaciones

Sigue la colaboración con el gobierno. –

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