Sindicales

13/3/2022

RIO NEGRO

Villa Regina: trabajadorxs de la Secretaría de Niñez y Familia en acción

Se necesita un plenario provincial para impulsar un plan de lucha unificado.

Foto: Prensa Obrera

En la ciudad de Villa Regina, Río Negro, trabajadores/as de la Senaf (Secretaría de Estado, Niñez y Familia) vienen llevando adelante asambleas diarias desde hace tres semanas. Denuncian condiciones de trabajo deplorables y que no todas/os cobran el plus por pandemia, a la vez que exigen un nuevo edificio y una real jerarquización, que se vea reflejada tanto en los salarios como en la infraestructura.

Laura y Alejandra, en las afueras de la oficina de Desarrollo Social de Río Negro, donde realizaron un piquete para visibilizar su situación, comentaron a Prensa Obrera de diversas situaciones de inseguridad laboral por incumplimiento de normas de higiene y seguridad en el trabajo. Contaron además que trabajan hacinados en pequeñas oficinas, con instalaciones eléctricas precarias. Hace tiempo se pudo detectar a tiempo un principio de incendio que pudo haber sido una tragedia.

Rechazan también que la delegación de la Senaf opere en un edificio prestado, ya que es una dependencia de Desarrollo Social, sin herramientas de trabajo acordes, atendiendo un área geográfica que abarca desde Huergo hasta Valle Azul con un solo vehículo. No cuentan tampoco con personal de limpieza, por lo que han sido las y los propios trabajadores los encargados de la higiene de su lugar de trabajo; tampoco hay personal de maestranza, debiendo transportarse a pulso los módulos alimentarios para familias vulnerables. No tienen salida de emergencia, ni un número suficiente de algo tan elemental como sillas, ni tampoco accesos inclusivos para personas con movilidad reducida.

Por otra parte, señalan la falta de programas para la extensa área que cubren, y afirman que sólo funciona Fortalecimiento Familiar. No hay quien lleve adelante intervenciones importantes ligadas a jóvenes en conflicto con la ley y programas preventivos promocionales. Ninguno de sus sus trabajadores llega a cubrir la canasta básica.

Su tarea representa una responsabilidad legal muy concreta que no tiene reconocimiento ni en sus salarios y mucho menos en sus condiciones de trabajo. Por ello, se planteó la necesidad de establecer lazos con las otras delegaciones en la perspectiva de organizar un plenario provincial para darle continuidad al reclamo en curso, puesto que como ya se sabe, el ajuste en marcha derivado del acuerdo con el FMI bloqueará los recursos para dichas demandas e implicará una reforma laboral de hecho. El gobierno provincial está ya precarizando trabajadoras/es y a la vez descuidando situaciones de niñez y familia, cuyos trabajadores necesitan recursos y mayor personal para poder atender los casos de manera adecuada.

Salarios iguales al costo de la canasta básica familiar. Plus pandemia. Edificio nuevo e infraestructura inmediatamente. Basta de precarización laboral.