Sindicales

23/12/1987|211

Hospital Español

Violento ataque contra los trabajadores y contra la salud pública

Desde hace 10 días el Hospital Español sufre un virulento ataque por parte del nuevo directorio, bajo el comando de Francisco Ríos Seoane, personaje de florido prontuario antiobrero, antidemocrático y también penal. A 6 días de asumida la nueva dirección despidió a la totalidad del cuerpo de delegados, pagó con vales, con retraso y en forma incompleta los sueldos de noviembre, despidió 4 médicos y suspendió a 40, cerró varias salas evacuando a los pacientes, suspendió de golpe la atención al PAMI y anunció el despido de 250 trabajadores, de médicos y técnicos. Estamos, entonces, en presencia de un verdadero vaciamiento de un centro de salud y liquidación de una fuente de trabajo. La brutalidad de esta acción provocó una vasta repercusión pública, denuncias de socios y familiares, adhesión de los trabajadores de organizaciones gremiales y políticas diversas.

Después de dirigir un paro de dos días, hasta el cobro de los sueldos, la Comisión Interna ocupó el hall del hospital, convirtiéndolo en un centro de agitación y difusión del conflicto. De allí salieron los comunicados, los reportajes y las colectas de solidaridad y hasta se improvisó un comedor para despedidos, que permanecen en el interior del establecimiento. Se realizaron asambleas, marchas internas y actos en la puerta del hospital. El aspecto más crítico del conflicto es su aislamiento. La amenaza de cierre y despidos masivos (todo el personal ha sido concentrado en un ala del hospital y los pacientes disminuyen), ha creado un clima de zozobra e incertidumbre entre el personal. La directiva de ATSA se ha limitado a hacer acto de presencia, pero ni siquiera ha convocado al plenario de delegados. En la memoria de los trabajadores está el cierre del Charcas, Los Andes, Buenos Aires, San Patricio y otros, que pasaron sin que ATSA dijera esta boca es mía.

El Ministerio de Trabajo acaba de aplicar conciliación con exigencia de levantar despidos y suspensiones. Hasta el momento la patronal ha desconocido la resolución, no dando trabajo a los despedidos. Es fundamental que las internas antiburocráticas exijan el plenario de delegados de ATSA para resolver medidas activas del gremio en solidaridad con el Español (y con laboratorios Byk Liprandi, que se encuentra ocupado) contra despidos y cierre de fuentes de trabajo. De no ser así, se está, una vez más, dejando librada la lucha de los establecimientos a su propio desangre.