Sindicales

28/4/2011|1174

Hospitales porteños: ¡Vivir del salario, no de los módulos!

La canasta familiar de una familia “tipo”, con dos hijos, no baja hoy de los 5.000 pesos mensuales -si se considera la canasta de alimentos y alquiler, la cifra subiría a 6.000 pesos.

¿Cuánto gana el enfermero de un hospital porteño al ingresar?

No más de 3.500 en mano por una jornada de seis horas que, en la mayoría de los casos, es una jornada con doble o triple número de pacientes respecto del aconsejado.

¿Qué hace un enfermero frente a esta situación? Apela a los módulos -esos bloques de 6 ó 7 horas fuera de jornada- con un jornal inferior al normal para poder cubrir el “hueco” de su salario.

Un régimen siniestro por partida triple.

Porque le permite al gobierno y a las autoridades seguir “pateando” hacia delante la resolución del déficit crónico de enfermería, componente vital de la política de vaciamiento de los hospitales.

Porque plantea una jornada extendida a enfermeros ya extenuados por una jornada laboral agotadora, aunque sea por seis horas, con la consecuencia natural de una atención que no puede ser óptima.

Porque crea la competencia entre trabajadores del hospital -tengan la función que tengan- para ver quién obtiene más módulos.

A diferencia de las horas extras, que se pagan más que la hora común (desde 50% y hasta el 100% cuando se trata del franco del trabajador que la realiza o de un feriado), el módulo se paga a un valor menor que el de la hora común.

Insistimos: son los bajos salarios los que fuerzan a los compañeros a realizar módulos para poder cubrir sus necesidades, excediendo todo límite de salubridad. En esta mecánica, el módulo se ha ido convirtiendo en una mercancía, objeto de negocios, prebendas y hasta de endeudamiento de los trabajadores a manos de conducciones gremiales corruptas.

Insistimos: es parte de una política de vaciamiento del sistema estatal de salud al no incorporar nuevos trabajadores para cubrir el plantel de enfermeros requerido por el número y calidad de los pacientes, además de reemplazar a los que se retiran o se jubilan.

¿Los módulos fueron inventados por Macri? No. Antes del PRO, Ibarra -aliado de los K- y Telerman -¿futuro acompañante de Solanas en su candidatura a intendente en la Capital?- impulsaron y dejaron correr los módulos.

Deténgase en estas cifras: en términos económicos, veinte módulos equivaldrían a un cargo de enfermería. En el año 2007, según datos de la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires, por el sistema de módulos se estaban pagando unos 4.000 cargos mensuales.

¿Cuántos cargos se están reemplazando hoy, cuatro años después? Muchos más.

Para la dirección actual del Sutecba, los módulos forman parte del paisaje, es decir que son un complemento “natural” del salario y no su perversión.

¿Qué ha hecho ATE frente a esta herramienta de vaciamiento y superexplotación?

Tribuna de Salud plantea:

• salario inicial equivalente al costo de la canasta familiar por una jornada de seis horas. No a los módulos.

• Incorporación de todos los enfermeros necesarios por número y calidad de pacientes.

• Fin de las tercerizaciones e incorporación del personal al convenio más favorable en los hospitales.