Luego de más de 50 días de lucha los trabajadores y trabajadoras municipales de Zapala despedidxs, sin causa por el gobierno de Carlos Koopmann, levantaron la medida de fuerza que estaban sosteniendo en la explanada municipal. La indiferencia estatal, la situación sanitaria frente a la pandemia, su salud y la de sus familias, sumado al aviso de cuarentena total, obligaron esta resolución.

Sostuvieron un acampe en la explanada municipal de 53 días, con una compañera encadenada, acompañado por innumerables actividades, desde marchas, bocinazos, feria de empanadas y tortas fritas, juntada de firmas, radio abiertas, ollas populares, volanteadas, etc. y recibieron el apoyo popular a sus planteos. Les compañeres fueron grandes protagonistas de la marcha local el 8 de marzo, en el día internacional de la mujer trabajadora, en la ciudad y una delegación viajó a la marcha en la ciudad de Neuquén. Llevaron su relato, como víctimas de la violencia del Estado, de la precarización laboral de larga data y de los despidos arbitrarios durante el cambio de gobierno. 

La unidad de lxs trabajadorxs fortaleció el conflicto, con una importante participación de distintos sectores, y destacable del sindicato docente Aten Zapala.

Sí brillaron por su ausencia 3 de los 4 sindicatos que tienen representación en el municipio. Nos referimos a ATE, Upcn y Soemz. Sin duda su papel de obsecuencia con el MPN ha sido corroborado una vez más. Pretendieron, en connivencia con el MPN, aislar la lucha, pero no pudieron. 

El gobierno municipal de Carlos Koopmann, prácticamente en manos de la secretaria de Gobierno, Belén Aragón, les ha dado la espalda, y ha atacado abiertamente a lxs trabajadorxs. Han adoptado una línea de denuncia al gobierno anterior, omitiendo la situación desesperante que tienen los compañeros y compañeras, con impuestos vencidos, servicios cortados, sin tener el plato de comida asegurado. El municipio ha violado abiertamente leyes laborales que ponen en riesgo al 80% de la planta actual. El precedente es grave, más en un contexto de ajuste, y mucho más teniendo en cuenta que uno de los principales argumentos del gobierno fue la filiación política que tenían muchos de ellos.

El gobierno anterior, en manos de Soledad Martínez (Unidad Ciudadana), también ha pretendido imponer su impronta al conflicto condicionando las decisiones de los compañeros. Siendo responsable de años de precarización laboral, efectuó un pase a planta que dejaba al descubierto a los compañeros y compañeras. Posteriormente alentó las expectativas en un proceso judicial que, obviamente, quedó en manos de un poder adicto al MPN, y que dilató de manera insoportable los tiempos. La conducción de la Asociación de Trabajadores Municipales abonó las expectativas en la justicia y fuerzas políticas patronales desgastó la enorme tenacidad que demostraron y demuestran lxs compañeros y compañeras.

Desde la banca del Frente de Izquierda, nuestra compañera diputada y dirigente del Partido Obrero, Patricia Jure, presentó proyecto de declaración para que se declarare de interés provincial, las reincorporaciones de los compañeros y compañeras, el oficialismo provincial del MPN y el bloque de Cambiemos se negaron a darle un tratamiento sobre tablas a este proyecto, seguiremos intentando cuando se retome la actividad legislativa.

La lucha de los compañerxs municipales pasa a una nueva etapa, como todas las luchas en curso en la actualidad. Es tarea de los compañeroxs y de todos quienes acompañamos sacar las conclusiones para seguir adelante. Esta lucha no está perdida, está en cuarentena. ¡¡Fuerza compañeres!!